“Desde fai 28 anos, non temos a sorte de poder ver nas Ermitas un dos seus símbolos culturais e tradicionais máis importantes; a partir deste ano, a Estoupa do Xudas nunca volverá a desaparecer”. Entre aplausos pronunció estas palabras Jorge Isla, vecino y maestro de ceremonias, en el acto de recuperación de la “estoupa” o estallido del “falso apóstol”, que tuvo lugar este domingo 31 de marzo.
Cientos de personas acudían al evento antes celebrado junto al crucero del santuario, trasladado ahora a una ladera a orillas del río Bibei. “Alégrome de ver tantas caras coñecidas”, destacó el presentador, que resaltó la asistencia de “xente emigrante que hoxe está aquí, na súa terra, para disfrutar do acto”, además de “os nenos pequenos, que para eles é a primeira vez de moitas que verán a Estoupa do Xudas”.
Reconocimiento
El acto de recuperación de la Estoupa, también sirvió para reconocer la labor realizada por la familia Porto a modo de tradición. Así lo expresó Jorge Isla cuando aludió a “as persoas que, antes do 96, e con moito esforzo, se adicaron a sacar adiante o acto e a preparar o falso apóstol, un duro traballo durante tantos anos”.
En esta ocasión, Francisco “Quico” Porto, ejerció de “fogueteiro” o técnico experto en pirotecnia, y explicó, a través de micrófono, la creación del muñeco Judas Iscariote a la multitud de curiosos que se agolpaba en la barandilla del río. “Eu fago todo”, explicó, tanto los elementos que hacen arder a la figura, como la parte ornamental, la estructura de madera, la careta de cartón, el pelo y el traje, “temos que facelo de forma que cando prenda o lume, arda todo”.
Al término de la Estoupa, y visiblemente orgulloso y emocionado, Porto se fotografió con sus hijos y demás familiares al pie de un Judas totalmente calcinado. Para ellos, la recuperación de este acto traspasa lo tradicional y llega hasta lo sentimental. “Después de tantos años, ahí estamos para seguir apoyando al Concello y a nuestra cultura”, explicó Porto, “haciendo lo que mejor que sé hacer”.
Tras comparar la falta de la tradicional Estoupa con los “séculos escuros” de la literatura gallega, el presentador aseguró que la celebración de ayer será “o rexurdimento no concello do Bolo”, que consiguió recuperar un patrimonio “que non é de ninguén, é das Ermitas, dos veciños, do concello”. El 31 de marzo de 2024, tal y como expresó, “vai quedar marcado na historia deste pobo, deste concello e desta comarca”.
La lluvia pareció ser la única que perdonó al Judas de Las Ermitas que volvió de nuevo a estallar por los aires este pasado domingo, como si el tiempo no hubiera pasado, cuando “pouco antes da misa do Domingo de Resurrección, prendíanlle lume e dicíanlle adeus ata o ano seguinte. Viva a Estoupa e vivan As Ermitas”.
