Las romerías en honor a San Benito de Cova en San Lorenzo de Piñor (Barbadás) y a San Benito de O Marañao, en el municipio de Cea, se celebraron ayer en sus correspondientes capillas. Tras más de una semana de novena dedicada a su patrón, ambas parroquias cerraron el ciclo con una romería popular.
La pequeña parroquia de San Lorenzo de Piñor, en Barbadás, recibió la visita de muchos fieles que se acercaron a la ermita de Cova do Lobo para acudir a una misa en honor a San Benito, santo al que los devotos acuden en busca de la cura del raquitismo. Las misas se celebraron cada hora desde las 6 de la mañana hasta la una, momento en que los fieles disfrutaron de una comida popular.
La romería de San Benito de Cova de Lobo, que convoca a centenares de fieles todos los años, registró también los ya conocidos atascos de tráfico en las carreteras que comunican con Piñor de Barbadás, por lo que Policía Local de ese municipio y Protección Civil se ocuparon de controlar el acceso.
Cientos de devotos de toda la comarca carballiñesa acudieron hasta la romería de San Benito do Marañao, en cuya ermita, enclavada en la parroquia de Longos, en el municipio de Cea, se oficiaron misas durante toda la mañana para finalizar , al mediodía, con la procesión del santo, con fama de curar las verrugas y otras malformaciones cutáneas. Como en toda fiesta popular no faltaron los puestos de 'pulpeiras', que estuvieron abarrotados durante toda la tarde, en la que también se procedió a la subasta de pollos, huevos y productos derivados de cerdo, que se transforman en donativos para la parroquia. Otras celebraciones similares se llevaron a cabo en Moldes (Boborás) y Cuñas (Cenlle), si bien a diferencia de O Marañao se prolongan hasta la noche con verbenas.
La romería de San Benito de Cova de Lobo, que convoca a centenares de fieles todos los años, registró también los ya conocidos atascos de tráfico en las carreteras que comunican con Piñor de Barbadás, por lo que Policía Local de ese municipio y Protección Civil se ocuparon de controlar el acceso.
Cientos de devotos de toda la comarca carballiñesa acudieron hasta la romería de San Benito do Marañao, en cuya ermita, enclavada en la parroquia de Longos, en el municipio de Cea, se oficiaron misas durante toda la mañana para finalizar , al mediodía, con la procesión del santo, con fama de curar las verrugas y otras malformaciones cutáneas. Como en toda fiesta popular no faltaron los puestos de 'pulpeiras', que estuvieron abarrotados durante toda la tarde, en la que también se procedió a la subasta de pollos, huevos y productos derivados de cerdo, que se transforman en donativos para la parroquia. Otras celebraciones similares se llevaron a cabo en Moldes (Boborás) y Cuñas (Cenlle), si bien a diferencia de O Marañao se prolongan hasta la noche con verbenas.
