El alero venezolano es el máximo anotador de la serie COB-Burgos con más de 16 puntos de media por partido y con unos porcentajes imponentes
Melilla es el primer equipo clasificado para las semifinales de la LEB Oro. Ayer derrotó por tercera vez consecutiva al Cáceres (82-88). Mientras, el Oviedo forzó el cuarto partido ganando en Huesca (76-85) y el Básquet Coruña toma ventaja antes el Breogán (75-76).
En esa misma batalla sigue un COB intachable desde el inicio de temporada y loable en la recta final. Los ourensanos son tan fiables, intensos o talentosos como cualquiera. Que le pregunten a un Burgos incapaz de sacárselo de encima.
Buena parte de culpa del salto de calidad cobistas la tiene Jhornan Zamora. El alero venezolano es el ejemplo de superación que ha seguido el COB. Llegó con una lesión de rodilla, careció de acierto durante buena parte de la liga y trabajó sin descanso hasta recuperar su verdadera versión. Zamora no tiene nada que demostrar en la LEB Oro.
"Estoy disfrutando y lo que intento es que los aficionados disfruten conmigo. Estoy en buen momento, físicamente creo que todavía puedo estar mejor pero estoy bien", asegura un jugador que vino a Ourense perdiendo dinero con respecto a las ofertas que tenía en Venezuela el pasado verano: "Me hablaron muy bien de Gonzalo García de Vitoria. Allí estaba dejado y tengo claro que he acertado". Hace un mes tuvo otra oferta de Venezuela que rechazó: "No se me pasó por la cabeza dejar el equipo. Lleguemos hasta donde lleguemos, que espero sea muy lejos".
Zamora promedia 16,7 puntos en la serie ante el Burgos y con un salvaje 63,6 por ciento de acierto en triples. Le quita peso: "Nos habíamos olvidado de los más importante, de la intensidad en el juego y no pensar tanto en unos jugadores o en otros". Y lo enlaza con el resultado colectivo: "No hubiese sido justo acabar la temporada perdiendo el jueves. El Burgos es un rival muy complicado y lo está demostrando pero vamos a pelear por ganarles otra vez y jugar el partido bueno de verdad, el del martes".
Deja claro que está disfrutando: "Estos son los momentos que te gustan, te llaman los amigos y la familia, todo el mundo te sigue... No tenemos presión".
La prensa venezolana lo sigue y ayer varios periódicos reproducían el video de Telemiño con su triple desde 21 metros: "Aquí metí uno con el Palencia y en Venezuela un par de ellos así pero nunca desde tan lejos". Y acaba con un mensaje inequívoco: "Nos vemos el martes en Burgos".
