Restricciones en Ourense

La hostelería de Verín abre con "ilusión" pero pide "sentidiño"

photo_camera El sacrificio ha sido duro pero ha merecido la pena en Verín que, tras varias semanas críticas y con un pico de casos de 92 -en octubre-, este miércoles anotaba un sólo positivo por covid-19. A esta evolución positiva han contribuido sus hosteleros que, tras un cierre voluntario y otro interpuesto por la Xunta, vuelven hoy a la actividad con más ganas e ilusión que nunca. No obstante, piden precaución y "sentidiño" a los ciudadanos.
Este miércoles los hosteleros prepararon sus locales para volver a la actividad tras mes y medio

El sacrificio ha sido duro pero ha merecido la pena en Verín que, tras varias semanas críticas y con un pico de casos de 92 -en octubre-, este miércoles anotaba un sólo positivo por covid-19. A esta evolución positiva han contribuido sus hosteleros que, tras un cierre voluntario y otro interpuesto por la Xunta, vuelven hoy a la actividad con más ganas e ilusión que nunca. No obstante, piden precaución y "sentidiño" a los ciudadanos. "Espero que la gente sea consciente, si salimos a loco porque hemos tenido los bares cerrados... malo. Aunque, insisto, nosotros, la hostelería, no somos el problema, somos parte de la solución", asegura Óscar Feijóo, responsable del Bar Bandolín. Este hostelero tuvo que cerrar su bar ya en septiembre y durante 23 días tras dar positivo en covid. "Por desgracia me tocó a mí, como a mucha otra gente. Me llamó un rastreador al haber estado en contacto con un positivo", recuerda Óscar, quien, pese a todo, y después de recuperarse y volver a abrir su bar, cerró en octubre para respaldar a sus compañeros de sector y ayudar a bajar los casos activos. "Ellos me llegaron a decir que si abría me entenderían, pero les dije que no, que si cerraban todos yo cerraba", recuerda el hostelero verinés. 


VERÍN (CAFÉ BANDOLÍN). 25/11/2020. OURENSE. Óscar Feijóo ultima los preparativos para la reapertura de su cafetería tras confirmar la Xunta de Galicia que relaja las restricciones en Verín, levantando el cierre perimetral y permitiendo los servicio en la hostelería. FOTO: ÓSCAR PINAL

Marcos Domínguez asumió la gerencia del Bar Botánico en plena segunda oleada y lo convirtió también en restaurante. Gracias al reparto a domicilio, este emprendedor verinés ha logrado salir a flote. "Tengo un negocio de espectáculos y una discoteca. Como ambos estaban cerrados, pues tiramos por la hostelería porque la parte de restauración todavía se podía llevar a cabo. Fue bonito mientras duró", recuerda tirando de humor. "Ha sido complicado, pero volvemos con ganas e ilusión. La gente respondió muy bien con la comida para llevar con Rumbo, que nos echó una buena mano", añade el empresario que, en la tarde de ayer, se afanó en limpiar, colocar, y reordenar el almacén y el local. 

Manuel Fernández, de O Fiadeiro -conocido en todo Verín por sus ricas tortillas-, aseguraba ayer sentirse feliz de volver a su actividad. "Home por favor, ¿como non imos a ter ilusión? ¡Temos moita! A xente xa parece que anda máis contenta pola rúa, antes non tiña a onde ir, andaba perdidiña".

Te puede interesar