Hace unos días, el gigante Amazon anunciaba la adquisición de One Medical por 3.800 millones de euros. Con esta operación, que supone una de las mayores de su historia, por detrás de la compra de WholeFoods (13.700 millones) y el estudio MGM por 8.500 millones, el gigante del e-commerce da un salto hacia adelante con su apuesta por la medicina. Parece que es tendencia entre las Big Tech la inversión en salud.
One Medical es una firma californiana que presta servicios de atención médica online y presencial. Opera en 182 consultorios médicos en 25 mercados de EE.UU. y su negocio se basa en clientes que pagan una tarifa de suscripción para acceder a doctores y servicios de salud digitales las 24 horas del día. La compañía que nació como un intento de avanzar en la digitalización del cuidado de la salud, recibiendo una inyección de capital por parte de Google, se posiciona como una alternativa de seguro médico para sus empleados. Su propuesta de valor se basa en proporcionar cuidados médicos a través de una app que facilita no solo video consultas, sino también una gestión de las citas que evita los habituales retrasos y esperas, tratando de generar una experiencia a sus clientes más satisfactoria y menos estresante.
No es la primera incursión de la compañía de Jeff Bezos en el ámbito de la salud, quien en los últimos años ha lanzado una farmacia en línea tras adquirir PillPack Inc., empresa que envía los medicamentos empaquetados, y ha abierto una clínica de atención primaria a disposición de sus empleados.
Pero Amazon no es la única, recientemente Apple publicaba un informe en el que alega que la salud es el futuro de la compañía. La empresa destacó sus servicios existentes como monitorización del sueño, clases de fitness, detección de fibrilación auricular, entre otros. De todos es sabido que sus dispositivos son capaces de detectar problemas cardíacos o incluso de enviar avisos de emergencias en caso de accidentes o caídas. Además, en los próximos meses tiene previsto añadir funciones relacionadas con la salud de la mujer y se ha comprometido en seguir desarrollando “tecnología basada en ciencia”, como monitorización de glucosa y de presión arterial. La compañía de Cupertino se posiciona como una de las empresas que más están interviniendo y colaborando en que la salud personal sea cada vez mejor.
Google también tiene la vista puesta en este sector desde hace más de una década. A través de inversiones millonarias, ya ha logrado importantes avances y la tendencia muestra que planea seguir por el mismo camino en múltiples campos entre los que destacan la Inteligencia Artificial o el aprendizaje automático en la fabricación de productos biológicos. Aunque el año pasado cerró su unidad de salud, aún posee empresas del área como Verily y Fitbit, la principal competencia del Apple Watch.
La razón por la que Amazon y otras grandes tecnológicas se adentren en el campo de la salud médica es simple: los datos, el nuevo petróleo de la economía digital. El sector de la salud cuenta con una gran sobrecarga de información, tanto de carácter clínico como socioeconómico y de comportamiento, algo que vale su peso en oro y que hará que las empresas puedan personalizar los servicios a sus clientes, mejorar sus ratios de retención y, sobre todo, aumentar sus ventas.
