Un estudiante de Vitoria recibe una paliza tras asistir a un acto por la unidad de España. Un grupo de estudiantes boicotea un acto de Rivera y Valls en el Liceo de Barcelona. Un miembro de los CDR grita a Borrell que "la Constitución es una puta farsa" durante un discurso en Bruselas. Todo el mismo día. ¿Los autores de esos escraches, de los golpes, de las interrupciones tienen idea de lo que es la libertad de expresión? De lo que sí saben es de faltar al respeto al adversario, de negar el derecho a la existencia, del recurso al pataleo y a la patada. Hace falta mucha tenacidad y tesón para no ceder a los acosadores y mucha convicción para seguir en la brecha frente a esas provocaciones. Y la obligación de no desistir porque son ellos los provocadores, los acosadores, los que pegan, quienes con sus gestos demuestran su falta de razón y cómo tratarían a los discrepantes en el caso de que llegaran al poder.
