Estar pendiente de 'Cachuliño' y de Bea Mato al mismo tiempo supone un serio peligro porque el cuello puede girar como el de la rapaza poseída del 'Exorcista'. El presidente de la patronal gallega, José Manuel Fernández Alvariño, y la conselleira de Traballo e Besnestar no son de palabras llanas, prefieren elevar sus pensamientos hasta la cumbre tengan o no razón, provoquen o no una carcajada. Hay que reconocerles el mérito de que siempre están ahí, regalando al menos un titular para hacer más digerible la cruda realidad. A 'Cholas' o a 'Cachuliño', como lo llaman sus allegados porque siempre saluda con un "hola, 'Cachuliño", la reforma laboral le parece tibia, muy de Rajoy para entendernos. También podría parecer un posicionamiento lógico al tratarse del representante de la patronal, pero Fernández Alvariño ya da por hecha una recuperación económica y laboral que "corre un grave riesgo por mensajes del tipo 'el cielo se toma por asalto'. El cielo se toma contratando y los candados se rompen con empleo".
Eso es precisamente lo que desea el personal, pero van los datos del día y dicen que en Galicia el paro ha subido en 4.588 personas el pasado noviembre, la segunda peor comunidad por detrás de Baleares, mientras en el conjunto del Estado ha decrecido en 14.688 trabajadores, el mejor dato este mes desde 1996. Las declaraciones de 'Cachuliño' hay que tomarlas con cautela porque también en su día se proclamó líder de un grupo de empresarios gallegos para tomar con socios extranjeros el control de NCG Banco con una inversión de "hasta 2.000 millones de euros". Ese tal José María Castellano sólo fue capaz de pescar 70 millones del empresariado gallego y al final con engaño del FROB como ya ha sentenciado un juzgado, pero la propuesta de 'Cholas' nunca llegó.
Mato pasó por el Parlamento para decir primero que la actuación del juez por la 'operación Zeta' llega al año 2000 y "por lo tanto también investiga la gestión del bipartito"y más tarde que sólo se investiga a un empresario por el fraude en los cursos de formación. Sentenció que la oposición busca una "estrategia de Salsa Rosa y Sálvame Deluxe" y hasta la nacionalista Montse Prado le dio la razón porque en el sumario se habla de bolsos, regalos y amistades peligrosas. Parece un infierno.
