Marcos F.L. reconoció en el Juzgado mixto de Xinzo que condujo pisando el acelerador más de la cuenta el pasado 24 de febrero. Aceptó, en un juicio en el Juzgado mixto de Xinzo, una pena de seis meses multa -a razón de seis euros al día-, además de un año y ocho meses de privación del derecho de conducir, además de las costas del proceso judicial. Todo ello por un delito contra la seguridad vial ya que un radar móvil ubicado en el kilómetro 198,100 de la A-52, a la altura de Sandiás, captó como el BMW que conducía iba a 218 km/hora cuando la velocidad máxima permitida era de 120 km/hora. No es la primera vez que el inculpado es condenado por conducir a una velocidad excesiva. Así, consta que fue condenado en enero de 2020 por el Juzgado de Instrucción 3 de Ourense.
El imputado reconoció los hechos en el juzgado instructor por lo que se benefició de una rebaja de un tercio en la penas solicitadas por la fiscal. En un principio, la acusación pública reclamaba 9 meses multa a ocho euros diarios y la privación del permiso durante dos años y medio.
