El obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet, presidió la eucaristía de las 12,00 horas en el santuario de San Benito de Allariz en su día grande, este lunes. Una celebración religiosa que puso el broche de oro a la conmemoración de las fiestas patronales de la villa alaricana, con cuatro días de fiesta, y que, además, sirvió para clausurar oficialmente el periodo jubilar que vivía el templo desde el pasado 21 de marzo.
Durante casi cuatro meses y tras la pertinente aprobación de la Penitenciaría apostólica, los fieles que visitaron al Santo, rezaron por el Papa, se confesaron y comulgaron, estuvieron en disposición de obtener indulgencias plenarias. Esta condición coincidió en el tiempo con el ascenso de la Iglesia de San Benito a santuario diocesano y, a lo largo de todas estas semanas de fe, también se celebró un ciclo de conferencias al filo de la historia de la iglesia y de su riqueza patrimonial, histórica y artística.
La misa para honrar a San Benito contó con la presencia de párrocos de localidades limítrofes.
