Oler, pasear, sentir, tocar, descansar, soñar. Allariz presentó ayer al mundo el primer Festival Internacional de Jardines estatal. Una propuesta novedosa y arriesgada que permite integrar al municipio alaricano en una selecta red que comparten una veintena de países en el mundo. Un paraíso para los sentidos que, a la belleza de sus diseños, añade propuestas originales que ya ayer provocaron sorpresa y admiración entre los presentes.
Pasadas las siete y media de la tarde, y tras una intensa lluvia, las puertas del Festival alaricano se abrieron de par en par. Jóvenes y mayores, familias con niños y grupos de amigos asistían al acto inaugural que, tras el discurso de las autoridades -entre las que estaba Jesús Casas, director general de Desarrollo Sostenible del Ministerio de Medio Ambiente que financió el proyecto con un millón de euros-, contó con las actuaciones del Grupo Folclórico de Ponte da Lima y Ardebuxo.
Ocho jardines efímeros, diseñados por el gabinete de arquitectura paisajística portugués que dirige Francisco Caldeira Cabral inauguraban la primera edición del festival que se podrá visitar hasta octubre. Después, el Concello retirará las piezas con el fin de preparar el terreno para una nueva edición que, para 2011, será en modalidad de concurso abierto a paisajistas, arquitectos, diseñadores y demás modalidades artísticas.
UN RÍO DE VIDA
En el año de la biodiversidad, la tierra es la protagonista del primer jardín. Dejando atrás el Parque Etnográfico del Arnoia y un tramo que hace de 'antesala' del jardín internacional con una muestra de elementos arquitectónicos del rural gallego, las parcelas se suceden siguiendo un cauce artificial. Más de 26.500 metros cuadrados donde se suceden novedosas interpretaciones sobre las energías renovables, el poder del río y de la información. También tienen su espacio los colores, los sabores y el arte popular. Este último con una parcela protagonizada por los míticos cabezudos que, conjuntamente con la del mundo rural, conquistaron a los presentes.
Ocho jardines efímeros, diseñados por el gabinete de arquitectura paisajística portugués que dirige Francisco Caldeira Cabral inauguraban la primera edición del festival que se podrá visitar hasta octubre. Después, el Concello retirará las piezas con el fin de preparar el terreno para una nueva edición que, para 2011, será en modalidad de concurso abierto a paisajistas, arquitectos, diseñadores y demás modalidades artísticas.
UN RÍO DE VIDA
En el año de la biodiversidad, la tierra es la protagonista del primer jardín. Dejando atrás el Parque Etnográfico del Arnoia y un tramo que hace de 'antesala' del jardín internacional con una muestra de elementos arquitectónicos del rural gallego, las parcelas se suceden siguiendo un cauce artificial. Más de 26.500 metros cuadrados donde se suceden novedosas interpretaciones sobre las energías renovables, el poder del río y de la información. También tienen su espacio los colores, los sabores y el arte popular. Este último con una parcela protagonizada por los míticos cabezudos que, conjuntamente con la del mundo rural, conquistaron a los presentes.
