Un total de 56 progenitores participan con sus hijos en el taller para la confección de gárgolas

Los padres celanovenses regresan a las aulas

Padres y alumnos comparten aula en el taller de confección de las gárgolas del Entroido. (Foto: Martiño Pinal)
Los escolares de Educación Infantil del colegio Sagrado Corazón de Celanova disfrutan estos días de la compañía de nuevos alumnos en clase: sus progenitores. Madres, padres e incluso algún abuelo asiste por las tardes al taller de confección de las gárgolas para el Entroido organizado por el centro escolar. El taller, que permitirá a los pequeños contar con una máscara típica del carnaval celanovés, es una excusa para que padres, hijos y docentes disfruten de una convivencia más estrecha.
Padres y alumnos de Educación Infantil del Colegio Sagrado Corazón de Celanova participan estos días en un taller de confección de gárgolas, las máscaras típicas del Entroido celanovés. Un total de 56 niños entre dos y seis años dedicará, hasta febrero, parte de su horario lectivo a la confección de caretas de papel acompañados de sus progenitores. ‘Trátase dunha actividade nova, pensada para que pais e nais estén máis en contacto cos nenos, á vez que aprenden unha nova manualidade que lles servirá de disfraz para o Entroido’, explicaba Conchi Caride, responsable del taller.

‘Axudamos ós nenos a facer a máscara aínda que nestas idades traballamos máis os país que os cativos. Pero tamén é un rato divertido que compartes con eles dentro da aula’, confesaba Silvia Noia, madre de Hugo que, con tres años.

Padres y madres coinciden en la importancia de compartir un espacio nuevo con sus hijos: ‘Os nenos quedan moi a gusto de que os seus pais estén con eles na escola’, confiesa Sindo Feijóo mientras ayuda a su hija Paula a moldear los ojos de la gárgola. Sindo no es el único hombre del taller. Desde el centro escolar confiesan que cada vez más padres participan y colaboran en las actividades escolares. ‘Para que logo digan que os pais non nos implicamos, vimos tanto ou máis que elas’, comenta Jorge Vázquez, quien confiesa que, desde el nacimiento de su hijo Diego de tres años, acude a todas las actividades y reuniones del centro.

Pero no sólo los padres se implican en las actividades del centro, en ocasiones y debido a la incompatibilidad con el horario laboral de los progenitores, son los propios abuelos los que se apuntan al taller.

Con este tipo de actividades, desde el centro celanovés tratan de fomentar ‘non só a interrelación entre pais e fillos nun entorno poco habitual, senón que permítenos ós profesores ter unha relación máis fluida cos proxenitores’, apuntaba Teresa Rodríguez, profesora de Educación Infantil.


Durante los próximos meses, Hugo, Sofía, Jonathan, Paula o Diego trabajarán codo con codo con sus padres en la confección de alrededor 70 máscaras que esperan poder sacar a la calle celanovesa, tal y como hicieron el pasado verano y en la celebración de la Romería Etnográfica Raigame, con el desfile dedicado a la ‘raíña’ de las fiestas y el cortejo de gárgolas y cabezudos. ‘Aínda que si este ano tampouco hai desfile, serviránnos para participar nas festas do colexio’, coincidían un grupo de madres. Esta no es la primera vez que el colegio Sagrado Corazón organiza un taller para la elaboración de máscaras entre los estudiantes. A través de un acuerdo con el Concello, fueron los propios alumnos del centro celanovés quienes llevaron a cabo la recuperación de la reina de las fiestas, una figura típica de las celebraciones en la villa de San Rosendo en la década de los años sesenta que, desde hacía años, permanecía olvidada en un almacén del Ayuntamiento.

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