La Corporación aprobó un plan de obras que, con aportación externa, ascenderá a 250.000 euros
La modificación del reglamento de régimen interior de la escuela infantil para niños de 0 a 3 años de Celanova, aprobada ayer por unanimidad en la Corporación, permitirá abrir las instalaciones en el mes de agosto si los progenitores así lo requieren. Así lo subrayaba el portavoz popular, Máximo Losada, durante su intervención para dar conocer las novedades del reglamento que también prima el uso del gallego en las aulas, aunque "fundamentalmente os cambios son para adaptalo ao decreto da Xunta", dijo.
Pese al respaldo, el BNG criticó la falta de consenso del grupo de gobierno durante su elaboración. "Botamos de menos non velo antes, para poder achegar as queixas que nos transmitiron os pais", señaló el portavoz Leopoldo Rodríguez, en referencia al baremo que no prima que ambos progenitores estén trabajando o que, en vez de la renta, se exija a las familias copia de las nóminas.
Gobierno y oposición dieron su apoyo a la modificación de crédito extraordinario de 96.500 euros que, con aportaciones de otras entidades, permitirá acometer obras por valor de 250.000 euros. Entre las más destacadas se encuentra la mejora de la señalización y los accesos a Castromao y la reproducción del barrio castrexo, la reforma del archivo, actuaciones de ahorro energético, la adecuación del velatorio de Viveiro, mejoras en la red viaria, así como la cubierta en las escaleras de acceso al colegio Curros Enríquez.
Durante la sesión, el BNG volvió a cuestionar la ausencia de presupuestos y las inversiones en la reproducción del poblado castrexo "que é diñeiro tirado", dijo Rodríguez. Mientras, los socialistas se interesaron por las reducciones en los servicios de transporte, así como la apertura del pabellón en verano, a lo que se le respondió que se abrirán dos días a la semana.
El traslado por parte del BNG de una petición vecinal para humanizar la calle Castor Elíces o la próxima instalación de terrazas en la Celso Emilio Ferreiro, completaron la sesión donde el regidor, Luis Ferro, informó de un proceso judicial abierto contra el Concello por supuestas anomalías en el proceso de adjudicación del campo de hierba artificial.
