Las antiguas escuelas de Vilaflor, en la parroquia de San Salvador de Paizás (en Ramirás), serán rehabilitadas para albergar el primer velatorio municipal. El Concello, donde el 46% de la población es mayor de 65 años (850 de los 1.856 vecinos) y tiene un saldo vegetativo de -49 habitantes (según datos facilitados por el Instituto Galego de Estadística en 2011), carece de unas instalaciones públicas que satisfagan las demandas vecinales y los residentes tienen que acudir a las instalaciones privadas de Vilavidal o la vecina Celanova.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 54.280 euros, sufragado conjuntamente por el Concello, la Diputación y el Estado a través de los planes provinciales de 2012, pondrá fin a una vieja reivindicación de los vecinos de la zona este del municipio.
Así lo explicaba ayer la alcaldesa de la localidad, María Pilar López, que explicó que los trabajos se centrarán en la habilitación del espacio que antaño ocupaban las escuelas rurales con el objetivo de que los vecinos lo utilicen como velatorio. 'No Concello so hai un tanatorio de carácter privado na zona de San Andrés, pero nesta parte do municipio os veciños quedaban bastante desvalidos', explicaba López.
Así lo explicaba ayer la alcaldesa de la localidad, María Pilar López, que explicó que los trabajos se centrarán en la habilitación del espacio que antaño ocupaban las escuelas rurales con el objetivo de que los vecinos lo utilicen como velatorio. 'No Concello so hai un tanatorio de carácter privado na zona de San Andrés, pero nesta parte do municipio os veciños quedaban bastante desvalidos', explicaba López.
