Lo del COB es inexplicable, burlesco. El club ourensano podría desaparecer en las próximas semanas al tiempo que se confirmará como uno de los más saneados del deporte nacional en cualquier modalidad y categoría profesional.
Su todavía presidente, Roberto Fernández Añel, comunicará hoy por escrito a los dos máximos accionistas, Concello y Diputación, su marcha pero lo hará 'dejando al club sin un euro de deuda', asegura. La explicación es para un futuro tan negro y un presente económico envidiable está en la falta de noticias del Concello.
'Es para llorar. Dejaré el club cumpliendo todos mis compromisos y después de intentar por activa y por pasiva una reunión con los propietarios del club para decidir su futuro', explica. Añel solicitó hace semanas al Concello esa reunión y sigue sin tener respuesta. Pero la clave está en la subvención. Primero se le negó la promesa que había adquirido el alcalde de mantenerla y ahora, como el resto de clubes, no tiene ni fecha ni cantidad para recibir la que le corresponda: 'Así es imposible, así no se puede hacer nada serio. Se acabo, me voy. Pase lo que pase no voy a seguir, ni de una manera ni de otra. Cualquier proyecto debe tener un horizonte temporal y así es imposible. No se puede trabajar en estas circunstancias'. Y añade: 'A estas alturas ya debíamos tener un entrenador y cuatro o cinco jugadores renovados y no tenemos nada porque no podemos'.
La desaparición
Fernández Añel habla claramente de la desaparición del club como la posibilidad más real a día de hoy. 'Si tengo que ser el último presidente del COB será una desgracia pero lo seré. Si lo que buscan es un enterrador, lo seré'.
Pero matiza que los motivos serán públicos: 'En la Asamblea explicaré claramente quienes han enterrado al COB. Allí estaré yo pero se verá claramente quienes son los culpables. Los dueños del club son los responsables de lo que le vaya a ocurrir al COB'.
Y explica que la llegada de la subvención pagará los atrasos que tiene el club de esta temporada aunque su retraso será la condena deportiva del COB al suponer la pérdida del aval de la temporada 2012/2013 y la imposibilidad de inscribirlo en la próxima campaña: 'Dejaré el club sin un solo euro de deuda y ahí se verán muchas cosas. Estaré cumpliendo con mis obligaciones como presidente en el día a día pero ya sin tomar ningún tipo de decisión. El club quedará totalmente saneado'.
Otra aberración más en un deporte ourensano que no ha dejado de perder peso y representantes en los últimos años en todas las modalidades. El COB se unirá en breve a clubes como el Ourense Atletismo o el Ourense Futbol Sala que ya son historia o rescoldos de épocas no tan lejanas. Ourense perderá en julio al equipo que más alto ha llevado su nombre.
'Es para llorar. Dejaré el club cumpliendo todos mis compromisos y después de intentar por activa y por pasiva una reunión con los propietarios del club para decidir su futuro', explica. Añel solicitó hace semanas al Concello esa reunión y sigue sin tener respuesta. Pero la clave está en la subvención. Primero se le negó la promesa que había adquirido el alcalde de mantenerla y ahora, como el resto de clubes, no tiene ni fecha ni cantidad para recibir la que le corresponda: 'Así es imposible, así no se puede hacer nada serio. Se acabo, me voy. Pase lo que pase no voy a seguir, ni de una manera ni de otra. Cualquier proyecto debe tener un horizonte temporal y así es imposible. No se puede trabajar en estas circunstancias'. Y añade: 'A estas alturas ya debíamos tener un entrenador y cuatro o cinco jugadores renovados y no tenemos nada porque no podemos'.
La desaparición
Fernández Añel habla claramente de la desaparición del club como la posibilidad más real a día de hoy. 'Si tengo que ser el último presidente del COB será una desgracia pero lo seré. Si lo que buscan es un enterrador, lo seré'.
Pero matiza que los motivos serán públicos: 'En la Asamblea explicaré claramente quienes han enterrado al COB. Allí estaré yo pero se verá claramente quienes son los culpables. Los dueños del club son los responsables de lo que le vaya a ocurrir al COB'.
Y explica que la llegada de la subvención pagará los atrasos que tiene el club de esta temporada aunque su retraso será la condena deportiva del COB al suponer la pérdida del aval de la temporada 2012/2013 y la imposibilidad de inscribirlo en la próxima campaña: 'Dejaré el club sin un solo euro de deuda y ahí se verán muchas cosas. Estaré cumpliendo con mis obligaciones como presidente en el día a día pero ya sin tomar ningún tipo de decisión. El club quedará totalmente saneado'.
Otra aberración más en un deporte ourensano que no ha dejado de perder peso y representantes en los últimos años en todas las modalidades. El COB se unirá en breve a clubes como el Ourense Atletismo o el Ourense Futbol Sala que ya son historia o rescoldos de épocas no tan lejanas. Ourense perderá en julio al equipo que más alto ha llevado su nombre.
