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Calabagueiros ya no es talismán para el Tres Cuñados

Tres Cuñados Calabagueiros
photo_camera Bruno, del Tres Cuñados, pisa la pelota en el inexpugnable Calabagueiros durante año y medio.

La derrota ante Benavente terminó con 545 días de supremacía como local de un Pizarras Los Tres Cuñados que no quiere alejarse más de la cabeza

La flor del Pizarras Los Tres Cuñados como local duró un año, cinco meses y 24 días. Ese es el tiempo transcurrido entre las dos últimas derrotas del conjunto valdeorrés en la cancha de Calabagueiros, en la Segunda B. El 20 de mayo de 2017, en la última jornada del curso 2016-2017, el equipo de Xocas Miranda se despidió de la liga ante sus aficionados con un 4-7 con los asturianos del Boal. El sábado, 545 días y temporada y media después, fue el Benavente (3-6) el que pescó la victoria.

El conjunto castellano, nuevo líder de la categoría, se llevó los puntos en un partido extraño. El Tres Cuñados compitió a un buen nivel,pero en la primera parte le faltó gol (0-2) y en la segunda, después de nivelar el marcador, "no acertamos en los momentos decisivos", aseguró el técnico Xocas Miranda. De esos momentos, el primero fue un remate de Javi con la portería vacía al palo para culminar la remontada. El segundo un error defensivo que costó el 2-3. Y el tercero, un error del árbitro, al no pitar una clara falta al borde del área que culminó con un remate casi de puerta a puerta que le costó el 2-4. "Ahí se complicó definitivamente el partido. Al final el árbitro dijo que podría haber pitado falta, pero...", lamentó Xocas Miranda.

Tras la derrota, del mal el menos, porque las sensaciones del equipo "volvieron a ser buenas varios partidos después. Perdimos pero ganamos la confianza que nos faltaba en partidos en los que incluso habíamos ganado", añadió Xocas.

Benavente ya es historia. El sábado, desde las 18:15 horas en As Pontes, espera O Esteo, un rival que pese a moverse por la zona media de la tabla "no será sencillo, sobre todo en su cancha. Tienen individualidades muy importantes, por nombres un gran equipo, aunque en el juego colectivo tienen más problemas. Por ahí pasan nuestras opciones", finaliza.


Sala Ourense


El proyecto del Sala Ourense en la Segunda B ha recibido un gran espaldarazo hacia su continuidad con la remontada y la victoria del domingo en Zamora ante el actual defensor del título. Ese 3-4 con goles de Arturo, Dani y un doblete de Allariz en la segunda mitad para voltear el marcador supone la segunda victoria consecutiva. La anterior, en casa con el Leis Pontevedra, también fue ante un rival directo en la lucha por la permanencia. Precisamente los pontevedreses son el equipo que ocupa la primera de las plazas de descenso, y ya está a nueve puntos del equipo de un Kike García que, sin confianzas, porque todavía falta mucho por hacer, se encuentra muy tranquilo. "Creo que estamos cumpliendo con creces. Hemos competido muy bien con los de arriba, incluso sumando puntos, y ante los de nuestra liga estamos cumpliendo, sacando victorias", afirma el entrenador del Sala Ourense.

Esta semana toca descansar, pues el rival, el Prone, ha sido expulsado de la competición. "Nos vendrá bien para sumar otros tres puntos y para recuperar a jugadores lesionados o con molestias (Bermejo, Raúl Rivero y Arturo)".

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