El COB gustó y convenció en su cuarta aparición en público de la pretemporada. Los de Rafa Sanz derrotaron con suficiencia a un Melilla que se quedó a años luz en juego e intensidad. Nada que ver con el equipo que debe aspirar a pelear con los mejores por el ascenso a la ACB.
Los norteafricanos pusieron de su parte para salir zarandeados del Pazo pero el COB hizo méritos de sobra para ganarse la renta adquirida. Se tomó el amistoso con la oficialidad de quién juega ante su público y no regaló ni un balón desde el inicio.
Sufrirá para anotar cerca del aro un COB corto de centímetros pero los de Rafa Sanz ya empiezan a demostrar que pueden ser un equipo muy complicado de derrotar. Suman todos. Barbour y Kedzo lideraron a su equipo en ataque pero mediado el segundo cuarto ya habían anotado todos los jugadores y cada uno con momentos de protagonismo.
Este COB convence desde la colectividad. Por momento incluso se gustó con jugadas para la galería.
La primera mitad fue impecable para un equipo corto de preparación y sin una de sus rotaciones. Llegó a encadenar un 36-7 de escándalo. Defendiendo al límite, cerrando el rebote, corriendo con criterio y jugando siempre con orden. Disfrutando en la pista.
La renta llegó a ser de 28 puntos (57-29) al inicio del tercer cuarto y ahí cambio el guión. Se relajaron los locales y pelearon por evitar un marcador humillante los visitantes. La renta bajó a 12 (71-59) pero no pasó de ahí. Barbour y Kedzo estiraron la goma y el canterano Saiz puso la guinda con un triple en su debut. El epílogo perfecto a un partido que confirma la buena pinta de un COB con mucho más zumo del que parece.
Sufrirá para anotar cerca del aro un COB corto de centímetros pero los de Rafa Sanz ya empiezan a demostrar que pueden ser un equipo muy complicado de derrotar. Suman todos. Barbour y Kedzo lideraron a su equipo en ataque pero mediado el segundo cuarto ya habían anotado todos los jugadores y cada uno con momentos de protagonismo.
Este COB convence desde la colectividad. Por momento incluso se gustó con jugadas para la galería.
La primera mitad fue impecable para un equipo corto de preparación y sin una de sus rotaciones. Llegó a encadenar un 36-7 de escándalo. Defendiendo al límite, cerrando el rebote, corriendo con criterio y jugando siempre con orden. Disfrutando en la pista.
La renta llegó a ser de 28 puntos (57-29) al inicio del tercer cuarto y ahí cambio el guión. Se relajaron los locales y pelearon por evitar un marcador humillante los visitantes. La renta bajó a 12 (71-59) pero no pasó de ahí. Barbour y Kedzo estiraron la goma y el canterano Saiz puso la guinda con un triple en su debut. El epílogo perfecto a un partido que confirma la buena pinta de un COB con mucho más zumo del que parece.
