El Monterrei, que se despedía de la categoría, le aguó la fiesta del campeonato al Nogueira con un claro 3-1. Iago y Luis anotaron los tantos locales en tanto Raúl Soto empataba de forma transitoria. Fue expulsado Dani.
El Monterrei de Nica Palomares finalizó su fugaz paso por la categoría destrozando la ilusión del Nogueira de proclamarse campeón de Liga. El Monterrei, que hace tres semanas derrotó al Atlético Vilamarín, fue sin embargo el mejor aliado para que el cuadro de Moncho Cuñarro pudiera celebrar su primer título.
Uno de los jugadores más técnicos, Iago, hilvanó dentro del área la acción del 1-0, rematando desde un ángulo cerrado.
Con más ímpetu que ideas, el Nogueira llegó a empatar con una de sus fórmulas de esta temporada, a balón parado. Pablo Gómez lanzó un centro desde la esquina que Raúl Soto transformó de cabeza. Antes del cierre repitierobn los mismo protagonistas, pero bajo palos salvaron Rojas y también Pedro.
Repertorio local
El equipo de Aníbal Pereira salió a matar y acabó suicidándose. Cada contra del Monterrei era un martirio para la defensa rival, que hizo agua. Las oportunas intervenciones del portero Roberto impidieron un descalabro mayor, y aun así Iago sentenció en la misma línea después de una vaselina de Quique.
Las noticias desde Vilamarín y el 3-1 dejaron al Nogueira con la miel en los labios, en tanto el Monterrei lamenta los errores del pasado y regresa a Segunda con la intención de volver pronto.
Uno de los jugadores más técnicos, Iago, hilvanó dentro del área la acción del 1-0, rematando desde un ángulo cerrado.
Con más ímpetu que ideas, el Nogueira llegó a empatar con una de sus fórmulas de esta temporada, a balón parado. Pablo Gómez lanzó un centro desde la esquina que Raúl Soto transformó de cabeza. Antes del cierre repitierobn los mismo protagonistas, pero bajo palos salvaron Rojas y también Pedro.
Repertorio local
El equipo de Aníbal Pereira salió a matar y acabó suicidándose. Cada contra del Monterrei era un martirio para la defensa rival, que hizo agua. Las oportunas intervenciones del portero Roberto impidieron un descalabro mayor, y aun así Iago sentenció en la misma línea después de una vaselina de Quique.
Las noticias desde Vilamarín y el 3-1 dejaron al Nogueira con la miel en los labios, en tanto el Monterrei lamenta los errores del pasado y regresa a Segunda con la intención de volver pronto.
