José Luis Sáez y José Luis Baltar firmaron ayer en la Diputación provincial el contrato por el cual se disputará el próximo mes de julio en el Pazo dos Deportes un torneo de selecciones de baloncesto.
Santiago, Ourense y Vigo. Esos fueron ayer los destinos de un José Luis Sáez volcado en los últimos años con Galicia. El presidente de la Federación se reunía a primera hora de la mañana con Marta Souto, directora xeral de Deportes de la Xunta, y se interesaba por proyectos de baloncesto destinados al deporte base. A las 12,30 horas llegaba a la Diputación provincial para firmar un acuerdo con Ourense por el que el próximo mes de julio se disputará un torneo internacional en el Pazo. Por la tarde firmaba el contrato para la disputa de la Copa LEB Bronce en Vigo. Son la continuación del amistoso España-Lituania del verano pasado y la Copa LEB Plata celebrada en Santiago.
Sáez hablaba ayer de Galicia y Ourense en la Diputación: En los años malos Galicia siempre nos trató bien. Es el momento de devolver algo de lo que nos dieron. Es un placer volver a Ourense. El presidente Baltar me llamó nada más acabar el Europeo y me resultaba muy difícil rechazar su petición de que volviera la selección, tan insistente, con tanta ilusión. Tenía una palabra y hay que cumplirla. Sáez habló también del próximo verano: Desde el año 84 tenemos una deuda con la afición. Los Juegos de Los Ángeles dejaron un sabor de boca fantástico. En Pekín sabemos que nos vamos a encontrar un torneo durísimo, un gran reto y esperamos conseguirlo. El torneo preparatorio de Ourense -el último antes de iniciar viaje hacia los Juegos de Pekín- será del más alto nivel.
En su intervención, José Luis Baltar hablaba también del equi po nacional: Ahora la selección española ya nos parece a todos invencible. El presidente de la Diputación ve en este torneo un punto y seguido: Será sólo parte de una cadena, después seguiremos pidiendo otros. Ya no tenemos miedo a organizar este tipo de acontecimientos y en parte gracias a Ángel Cid y José Domarco. Había ciudades muy importantes interesadas, pero se ha vuelto a demostrar que no todo es dinero o intereses políticos. Escuchar el himno nacional con el Pazo lleno fue un orgullo. Ya sólo por volver a sentir eso ya vale la pena.
Después, a las 13,00, José Luis Sáez, acompañado de Alfonso Seoane, gerente de la Fundación del Baloncesto, abandonaba la Diputación. Lo hacía andando para dirigirse a una calle del Paseo que recorrió sin ninguna prisa. En seis meses regresará, pero entonces como segundo de a bordo ya que la protagonista entonces será la selección.
Sáez hablaba ayer de Galicia y Ourense en la Diputación: En los años malos Galicia siempre nos trató bien. Es el momento de devolver algo de lo que nos dieron. Es un placer volver a Ourense. El presidente Baltar me llamó nada más acabar el Europeo y me resultaba muy difícil rechazar su petición de que volviera la selección, tan insistente, con tanta ilusión. Tenía una palabra y hay que cumplirla. Sáez habló también del próximo verano: Desde el año 84 tenemos una deuda con la afición. Los Juegos de Los Ángeles dejaron un sabor de boca fantástico. En Pekín sabemos que nos vamos a encontrar un torneo durísimo, un gran reto y esperamos conseguirlo. El torneo preparatorio de Ourense -el último antes de iniciar viaje hacia los Juegos de Pekín- será del más alto nivel.
En su intervención, José Luis Baltar hablaba también del equi po nacional: Ahora la selección española ya nos parece a todos invencible. El presidente de la Diputación ve en este torneo un punto y seguido: Será sólo parte de una cadena, después seguiremos pidiendo otros. Ya no tenemos miedo a organizar este tipo de acontecimientos y en parte gracias a Ángel Cid y José Domarco. Había ciudades muy importantes interesadas, pero se ha vuelto a demostrar que no todo es dinero o intereses políticos. Escuchar el himno nacional con el Pazo lleno fue un orgullo. Ya sólo por volver a sentir eso ya vale la pena.
Después, a las 13,00, José Luis Sáez, acompañado de Alfonso Seoane, gerente de la Fundación del Baloncesto, abandonaba la Diputación. Lo hacía andando para dirigirse a una calle del Paseo que recorrió sin ninguna prisa. En seis meses regresará, pero entonces como segundo de a bordo ya que la protagonista entonces será la selección.
