El juzgado número 4 de Salamanca ratificó su dictamen del pasado mes de julio por el que insta a la Federación española de fútbol a inscribir al Salamanca Athletic Club en la competición de Segunda división B.
El nuevo equipo salmantino fue creado por Juan José Hidalgo tras comprar los derechos deportivos de la Unión Deportiva Salamanca durante su proceso de liquidación. La adquisición fue realizada antes del 1 de julio y por lo tanto libre de cargas, pese a la oposición de la AFE y de la propia Federación. De hecho, ambos organismos presentaron recursos contra la decisión, recursos que han sido desestimados. El caso del Lleida es en el que se inspira el empresario salmantino.
Así las cosas, la Federación se encuentra ante otro obstáculo puesto que el juzgado le obliga a la inscripción del equipo salmantino contra su voluntad. El precedente del Orihuela vuelve a sobrevolar sobre el ente federativo, un caso que se le fue de las manos la temporada pasada. El conjunto alicantino fue descendido a Tercera por motivos administrativos y con la competición ya avanzada un juzgado dictaminó que debía incorporarse a la competición en el grupo 3. Ante la imposibilidad de descender a un equipo para meter al Orihuela, el grupo quedó compuesto por 21. No le fue nada bien la experiencia al conjunto alicantino, que perdió la categoría al final de la competición dado que acabó en el puesto decimonoveno, con sólo siete victorias.
Con la Segunda división pendiente especialmente del Alcorcón, con el Guadalajara asegurando que llegará hasta el final para continuar en una división que ganó en los terrenos de juego pero que podría perder en los despachos, la Segunda B, ya en manos de la Federación española, tampoco tiene las cosas nada claras.
Porque no es sólo el caso del Salamanca, pendientes están también Guijuelo o Zamora entre otros. Tan convencido debía estar de su victoria Juan José Hidalgo que a menos de tres semanas del inicio del campeonato, previsto para el 25 de este mes, el empresario ya ha confirmado el técnico que va a dirigir su proyecto es Gustavo Siviero, exentrenador del Murcia. En los próximos días empezarán a llegar los nuevos jugadores que se pondrán a las órdenes del argentino para preparar contrarreloj el inicio del campeonato.
Así las cosas, la Federación se encuentra ante otro obstáculo puesto que el juzgado le obliga a la inscripción del equipo salmantino contra su voluntad. El precedente del Orihuela vuelve a sobrevolar sobre el ente federativo, un caso que se le fue de las manos la temporada pasada. El conjunto alicantino fue descendido a Tercera por motivos administrativos y con la competición ya avanzada un juzgado dictaminó que debía incorporarse a la competición en el grupo 3. Ante la imposibilidad de descender a un equipo para meter al Orihuela, el grupo quedó compuesto por 21. No le fue nada bien la experiencia al conjunto alicantino, que perdió la categoría al final de la competición dado que acabó en el puesto decimonoveno, con sólo siete victorias.
Con la Segunda división pendiente especialmente del Alcorcón, con el Guadalajara asegurando que llegará hasta el final para continuar en una división que ganó en los terrenos de juego pero que podría perder en los despachos, la Segunda B, ya en manos de la Federación española, tampoco tiene las cosas nada claras.
Porque no es sólo el caso del Salamanca, pendientes están también Guijuelo o Zamora entre otros. Tan convencido debía estar de su victoria Juan José Hidalgo que a menos de tres semanas del inicio del campeonato, previsto para el 25 de este mes, el empresario ya ha confirmado el técnico que va a dirigir su proyecto es Gustavo Siviero, exentrenador del Murcia. En los próximos días empezarán a llegar los nuevos jugadores que se pondrán a las órdenes del argentino para preparar contrarreloj el inicio del campeonato.
