Una liga con ADN ourensano

La nueva Segunda Federación dará comienzo este fin de semana para tomar el relevo de una Segunda División B que ya es historia del fútbol nacional. La liga en la que tradicionalmente militó el extinto CD Ourense y que por fin encuentra relevo en el fútbol provincial. Ahí estará el Arenteiro, que logró el ascenso el año pasado y que acumula la mitad de los 12 futbolistas ourensanos que estarán en la categoría. Junto al técnico Fran Justo, seis jugadores tiene DNI ourensano. El portero Diego García, los defensas Germán Novoa y Portela, el centrocampista Álex Fernández y los delanteros Rubén Arce y Joni. Además, salvo Germán Novoa y Joni, los otros cuatro tienen experiencia en la antigua Segunda B. Habrá otros seis jugadores ourensanos militando en cuatro equipos gallegos. En el Pontevedra, Diego Seoane Pérez, que llega desde el Racing Ferrol, y David Castro, que lo hace desde el Compostela. El defensa Seoane sabe que está en uno de los "cocos" del grupo. "Está claro que nuestro objetivo es el ascenso, no lo ocultamos, pero seguro que otros equipos también piensan lo mismo". Y sobre posibles candidatos nombra a, "los gallegos, que van a ser muy complicados, los madrileños, el Avilés o el Salamanca". Diego Seoane no tiene claro que categoría se va encontrar: "Habrá que ir viendo como se desarrolla y que nivel tiene. Aunque no va ser fácil y todos los partidos serán muy complicados". Otro veterano y con muchas horas de fútbol es Manuel Rodríguez Morgade. El defensa del Coruxo, pese a sus 37 años no piensa en la retirada: "Me encuentro bien y aún no veo cerca la retirada, pero soy consciente que el propio fútbol te acaba apartando". Manu es rotundo al afirmar que "la Segunda B necesitaba un cambio y con estos nuevos formatos va ser ilusionante, tanto para los equipos como para los aficionados". Sobre su equipo espera, "resarcirnos del año pasado, que no fue bueno, e intentar estar en el pelotón de arriba". Junto a él también está en el Coruxo Diego Martínez Alonso, que tras varios años en Cataluña, vuelve a Galicia. En el Compostela, el meta Pato Guillen coincide en que "la categoría es una incógnita, pero pienso que el nivel debe ser un poco inferior a la Segunda B" . Y espera que "podamos estar lo más arriba posible. Llegó gente nueva, tenemos que acoplarnos, pero si lo hacemos rápido y empezamos bien podemos llegar a pelear por los play off de ascenso". Junto a él en Santiago estará Matías Vesprini, un argentino con la familia en Ourense. Por último, en el Bergantiños de Carballo repite el atacante Martín Lamelas, que se muestra optimista: "El objetivo es asentarnos en la categoría, pero no renunciamos a nada. Tenemos un buen equipo, con hambre, ganas de crecer y vamos a dar mucha guerra, sobre todo en nuestro campo, dónde debemos hacernos fuertes". Y sobre la categoría tiene claro que "los grandes se fueron a la Primera Federación y algo debería de bajar el nivel, aunque seguro que será igualada y muy complicada".