La pareja también había dominado el sábado en la prueba de Clásicos

Mecca y González repiten en el Rally de Antiguos

Uno de los participantes, en el momento de tomar la salida del Rally de Antiguos. (Foto: Xesús Fariñas)
La lluvia respetó la celebración de un Rally de Antiguos que había quedado ’aparcado’ desde la década de los 90 y que tuvo como vencedores a Giuseppe Mecca Stolfi y su copiloto Adolfo González. A las diez y media de la mañana tomaron la salida los más 20 participantes que tuvieron que recorrer casi 70 kilómetros con siete controles situados a lo largo del recorrido.
Guiseppe Mecca Stolfi y su copiloto, Adolfo González, fueron los más regulares en la VI edición del rally ourensano. Pilotaron un Fiat 1.100 del año 1954 y acabaron penalizando 19 puntos. Segundos fueron Eduardo Sánchez y Ana María Saborito con un Renault 8 Gordini de 1966 y pertenecientes a la Escudería Clásicos Ourense. Terceros Daniel Milnes y Diego Sarmiento con un Jaguar XK 140 de 1955.

Mayoría ourensana A diferencia del Rally de Clásicos celebrado el sábado la mayoría de participantes en el de Antiguos pertenecían a escuderías ourensanas. 18 de ellos pertenecen a la Escudería Clásicos Ourense y uno al Ourense motor sport. El resto de participantes pertenecían a la Escudería Vigo Clásicos y la Escudería Centollo de A Coruña.

Ourense vivió un fin de semana con claro protagonismo de los automóviles históricos que ya piensa en su reedición dentro de un año. El primer paso, recuperar el Rally de Antiguos, ya está dado.

Premio para todos, una ’pulpada’ en la llegada a la aldea de Couso

La prueba comenzó en la Plaza Mayor y tomó dirección a Xunqueira de Ambía donde los participantes hicieron parada para ver la colegiata de Santa María la Real. El rally tomó después dirección a Xinzo de Limia y finalmente llegó a la Aldea de Couso donde estaba la llegada. Casi 70 kilómetro de recorrido. Los ganadores de cada categoría tuvieron su premio pero además hubo uno genérico para todos los pilotos que tomaron la salida y para los organizadores. Allí esperaba una pulpada que se prlongó durante horas. Fue la guinda a un rally que no parece dispuesto a esperar otras dos décadas para volver a lucirse.



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