Los espectadores del Paco Paz ya no saben qué hacer para ver ganar a su equipo. Lo peor es que el propio equipo tampoco parece saberlo, y ya es el último en la clasificación. Más de 3.500 se presentaron ayer en el partido contra el Iruña, motivados además por dos actos sociales más que loables.
El club se sumó a la celebración del día Mundial de las personas con discapacidad, facilitando a todas las asociaciones o delegaciones ourensanas la presentación de su labor y proyectos ante los socios. Los principales representantes de cada una fueron invitados a presenciar el partido desde el Palco, si bien una de las más especiales fue la niña Yolanda Airas, quien pudo disfrutar a pie de pista, junto a su madre y hermana de todas las sensaciones del baloncesto.
Otra de las buenas iniciativas desarrolladas ayer fue la de permitir el acceso gratis al partido de todos aquellos que se presentasen en las puertas del Paco Paz con un quilo de alimentos. Una propuesta que la asociación juvenil 'Amencer', en colaboración con Cáritas Diocesana, organiza de forma desde hace nada menos que 24 años.
Los alimentos serán destinados a las familias más desfavorecidas de la provincia. Las tortas del partido se las llevó una afición que, una vez más durante esta temporada, paladeó la victoria y regresó a casa con otra derrota. Hubo pitos contra el técnico y los jugadores.
Otra de las buenas iniciativas desarrolladas ayer fue la de permitir el acceso gratis al partido de todos aquellos que se presentasen en las puertas del Paco Paz con un quilo de alimentos. Una propuesta que la asociación juvenil 'Amencer', en colaboración con Cáritas Diocesana, organiza de forma desde hace nada menos que 24 años.
Los alimentos serán destinados a las familias más desfavorecidas de la provincia. Las tortas del partido se las llevó una afición que, una vez más durante esta temporada, paladeó la victoria y regresó a casa con otra derrota. Hubo pitos contra el técnico y los jugadores.
