El Envialia prepara el asalto a La Estación para lograr el punto que le lleve a la Copa de España, y el Burgas dar la talla ante otro grande, el Alcorcón
La Primera división de fútbol sala femenino alcanza el sábado el final de liga. Para los equipos locales, y después del derbi que se llevó el Burgas (2-3), toca hacer un último esfuerzo. Sobre todo para el Ourense Envialia. El equipo de Chipi prepara el asalto al pabellón La Estación, donde espera lograr ante el Atlético Féminas el punto que le lleve a la Copa de España. El Cidade de As Burgas, por su parte, busca despedirse de la competición dando la talla ante otro grande, el Alcorcón.
Las cuentas dicen que el Envialia sigue dependiendo de sí mismo, porque se mantiene cuarto, pero en este momento ya no tiene margen de error (si pierde y el Universidad de Alicante gana en Móstoles serán las valencianas las que alcancen la fase final del torneo copero).
La complicación será máxima porque enfrente estará ni más ni menos que el actual campeón de Liga y Copa, el Atlético, que marcha segundo y se está jugando el título con Burela. "El objetivo es conseguir un partido en el que llevar la ventaja y de no ser así que marche igualado para que si el encuentro de Burela está decidido forzar la situación para llevarlo a nuestro terreno. Llegada esa situación un partido de contacto puede favorecernos", afirma Chipi, entrenador del Envialia.
Hasta el momento, las ourensanas en las 'finales' solo han salido bien paradas en la Copa Xunta. Aquel día superaron al Burgas para hacerse con el título. Después, sin embargo, ni en el duelo liguero directo ante Universidad de Alicante ni el sábado ante el Burgas lograron sentenciar a su favor.
Pero el sábado tratarán de revertir la situación y el precedente con el Atlético, no en el marcador aunque sí en el juego, no tiene mala pinta: "Me gustó mucho aquella primera parte en Os Remedios. El Atlético es un equipo al que le cuesta mucho renunciar al balón, solo lo hace si se ve muy superado, y nosotras lo conseguimos. Después, fallamos dos doble penaltis y un penalti, y se nos escapó la victoria", añade Chipi.
Más reciente, el derbi del pasado sábado, el técnico del Envialia destaca que "hicimos el partido que queríamos pero el problema fue que tras el 2-0 no supimos jugar los tres minutos finales, no fuimos inteligentes. Nos hicieron cinco ataques con juego de cinco y en cuatro no nos hicieron daño y en el otro tuvimos un remate a puerta vacía desde medio campo. Teníamos controlado el partido totalmente. ¿El vestuario? Estaba hundido, pero no por el trabajo si no por la forma como se dio ya que las jugadoras terminaron con la sensación de haber regalado el partido".
El Burgas, muy contento
Mucho más contentas finalizaron las jugadoras del Cidade de As Burgas. "Los goles coincidieron al final pero en el cómputo global del partido fuimos superiores, jugaron a no perder y les salió mal. Estoy muy contento porque su primer gol llegó muy rápido y sin embargo el equipo reaccionó bien", asegura el técnico Manolo Codeso.
Y ahora toca la despedida ante Alcorcón (sábado, 17,00 en Os Remedios). "Trataremos de despedir la liga con un buen sabor de boca. Ha sido una pena dejarnos tantos puntos con equipos en teoría inferiores. La verdad es que con los grandes dimos la cara: ganamos en Alicante y en Roldán, los dos partidos al Envialia, al Burela en la Copa..., demostramos estar a su altura pero lo que no contábamos era perder los seis puntos con Majadahonda y con Rubí, o las derrotas en Poio o Valdetires", finaliza Manolo Codeso, entrenador del Cidade de As Burgas.
