El inglés Jonathan Brownlee hizo buenos los pronósticos que le señalaban como principal favorito y ganó la prueba del Mundial de triatlón disputada en Madrid, en cuyo historial unió su nombre al de su hermano Alistair, ausente esta vez y vencedor los últimos tres años en la capital española.
'Jonny', que el año pasado había firmado un doblete junto a su hermano mayor, no dejó escapar su gran oportunidad, dadas las bajas en la Casa de Campo de éste y del español Javier Gómez Noya, los que se han repartido los últimos cuatro títulos mundiales.
El menor de los Brownlee ganó con autoridad al cubrir el trazado madrileño, de 1.500 metros a nado, 40 kilómetros de ciclismo y diez más de carrera a pie, en un tiempo ganador de una hora, 51 minutos y 49 segundos, con una ventaja de 41 segundos y un minuto y seis segundos sobre los rusos Alexander Bruykhankov y Dmitry Polyanski, segundo y tercero en una prueba en la que el mejor español fue Mario Mola, noveno, con Iván Raña, que queda fuera de los Juegos, en el puesto 44.
Mientras, el gallego Iván Raña, campeón del mundo de triatlón en 2002 y de Europa ese año y al siguiente, que perdió la oportunidad de clasificarse para los Juegos de Londres, que hubieran supuesto su cuarta comparecencia olímpica, explicó que estaba 'triste', porque había hecho lo que había podido 'pero no tenía más'.
'Estoy triste, porque estaba muy motivado. Al no poder correr, había subido mucho mi nivel nadando y en bici. Estaba pletórico, pero no ha podido lograr nada más', finalizó.
El menor de los Brownlee ganó con autoridad al cubrir el trazado madrileño, de 1.500 metros a nado, 40 kilómetros de ciclismo y diez más de carrera a pie, en un tiempo ganador de una hora, 51 minutos y 49 segundos, con una ventaja de 41 segundos y un minuto y seis segundos sobre los rusos Alexander Bruykhankov y Dmitry Polyanski, segundo y tercero en una prueba en la que el mejor español fue Mario Mola, noveno, con Iván Raña, que queda fuera de los Juegos, en el puesto 44.
Mientras, el gallego Iván Raña, campeón del mundo de triatlón en 2002 y de Europa ese año y al siguiente, que perdió la oportunidad de clasificarse para los Juegos de Londres, que hubieran supuesto su cuarta comparecencia olímpica, explicó que estaba 'triste', porque había hecho lo que había podido 'pero no tenía más'.
'Estoy triste, porque estaba muy motivado. Al no poder correr, había subido mucho mi nivel nadando y en bici. Estaba pletórico, pero no ha podido lograr nada más', finalizó.
