La campeona continental se clasifica para la tercera final consecutiva de una gran competición, lo que consiguieron los germanos entre 1972 y 1976

España sucede a Alemania

Los españoles celebran la clasificación para la final del domingo en Kiev. (Foto: YURI KOCHETKOV)
La victoria contra Portugal impulsó a España a su tercera final consecutiva en una gran competición, tras la Eurocopa 2008 y el Mundial 2010, una hazaña que no había logrado ninguna selección desde que lo hizo Alemania entre 1972 y 1976, cuando jugó tres partidos decisivos por el título, dos europeos y uno mundial.
España igualó esa marca en el Donbass Arena de Donetsk, en las semifinales de la Eurocopa 2012, en la que se impuso en los penaltis a Portugal. El domingo disputará el trofeo en el Olímpico de Kiev.
Es la tercera final consecutiva para España, ganadora de la Eurocopa 2008 en Austria y Suiza. El 29 de junio de ese año, en el estadio Ernst Happel de Viena, venció a Alemania con un gol de Fernando Torres en el minuto 33, levantó el título y regresó a la primera plana del fútbol europeo 44 años después.
Dos años más tarde dio un paso más e hizo historia en el Mundial de Sudáfrica 2010. El 11 de julio, en el Soccer City de Johannesburgo, España superó a Holanda en la prórroga con un tanto de Andrés Iniesta y culminó su fenomenal fútbol con el mayor éxito de su historia, la Copa del mundo.
Ahora llega a una nueva final. Y avista un récord. Nadie ha ganado nunca Eurocopa-Mundial-Eurocopa en una secuencia seguida. La República Federal de Alemania, en los 70, fue la última que enlazó tres finales y que tuvo al alcance ese hito, pero cayó en 1976 con Checoslovaquia en los penaltis, con el famoso lanzamiento de Antonín Panenka.
Aquel conjunto germano, con jugadores como Sepp Maier, Berti Vogts, Paul Breitner, Franz Beckenbauer, Gerd Mueller, Uli Hoeness o Jupp Heynckes, ya había jugado, y ganado, dos finales antes. Fue campeón del Mundial de 1974, con un triunfo sobre Holanda (2-1), y de la Eurocopa de 1972, al imponerse por 3-0 a la desaparecida Unión Soviética.

La decimoquinta tanda
Asimismo, la selección española salió vencedora de la decimoquinta tanda de penaltis de una Eurocopa. Es además la segunda ocasión consecutiva en la que la campeona continental supera lo que se ha denominado lotería de los lanzamientos desde los 11 metros, ya que en la pasada edición venció a Italia de esta forma en los cuartos de final.
En aquella oportunidad marcó el tanto definitivo Cesc Fábregas, al igual que ahora en Donetsk, pero en este caso fue para acceder a la segunda final consecutiva.
Con anterioridad, España había ganado a Dinamarca en la semifinal de Francia 84. El lanzamiento definitivo corrió a cargo de Manu Sarabia.
La única ocasión en la que España cayó en la tanda de penaltis en una Eurocopa fue en los cuartos de final de Inglaterra 96, ante el conjunto anfitrión, ante el que perdió por 2-4.
La primera tanda de la historia de la Eurocopa vio nacer el famoso lanzamiento del checo Panenka en 1976 ante Maier. Los checos ganaron en las otras dos ocasiones que llegaron a los penaltis. Ante Italia por el tercer puesto cuatro años después y frente a Francia en la semifinal de 1996. Tienen un récord de veinte lanzamientos ejecutados sin fallo alguno.

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