Los castellonenses, ya eliminados, reciben a un Nápoles obligado a ganar

La honra para el Villarreal

El Villarreal recibe al Nápoles sin nada que jugarse, si acaso la honra deportiva y la repercusión económica de la victoria, todo lo contrario que el conjunto italiano, obligado a ganar o hacer el mismo resultado que el Manchester City en casa contra un Bayern ya clasificado como primero de grupo.
Lo que para el Villarreal es un trámite también se ha convertido en una cuestión de amor propio por el deseo de no despedirse de la competición sin ganar.

El partido ha estado marcado por las dudas que han llegado desde Manchester sobre la competitividad del Villarreal, y por las procedentes de Italia sobre una excesiva motivación.

El partido para el equipo castellonense no se puede desvincular de la trayectoria irregular en la Liga, en la que tras una pequeña reacción ha vuelto a las andadas perdiendo en Málaga y Santander.

Garrido recupera a futbolistas como Zapata, Camuñas o Gerard Bordas, con lo que sólo quedan en la enfermería Rossi y Catalá.

El Nápoles ha logrado vender ya 1.530 entradas a aficionados que no querían perderse un acontecimiento histórico que no sucedió ni cuando Maradona militó en el club italiano (1984-1991).

EL MADRIGAL, 20,45. GOLTV.

Villarreal: Diego López; Mario, Musacchio, Gonzalo, Oriol, Bruno, Senna, Borja Valero, Hernán Pérez, Nilmar y Marco Ruben.

Nápoles: De Sanctis; Campagnaro, Cannavaro, Aronica; Maggio, Gargano, Inler, Dossena, Hamsik; Lavezzi y Cavani.

ÁRBITRO: SVEIN ODDVAR MOEN.

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