El alemán Sebastian Vettel (Red Bull), que desoyó órdenes de equipo y rebasó a su compañero el australiano Mark Webber para lograr el triunfo en Malasia, entra líder del Mundial de Fórmula Uno en Shanghái, sede este fin de semana del Gran Premio de China, donde el español Fernando Alonso (Ferrari), retirado en Sepang, luchará de nuevo por el triunfo.
Vettel, de 25 años, ganador de los tres últimos Mundiales, firmó en Malasia su vigésima séptima victoria en la categoría reina del automovilismo. Que no todos aplaudieron. Recibió una reprimenda por parte de su propia escudería y acabó pidiendo disculpas.
Merced a su tercer puesto de Australia, el alemán encabeza el Mundial con 40 puntos, nueve más que el finlandés Kimi Raikkonen (Lotus) -vencedor en Melbourne- y con 14 sobre Webber.
Alonso es sexto en el campeonato, con 18 puntos, cuatro menos que su compañero brasileño Felipe Massa, quinto, tras acabar en ese puesto en Malasia, donde el mexicano Sergio Pérez estrenó su casillero con McLaren. 'Checo' fue noveno y suma dos puntos, los mismos que su compañero inglés Jenson Button.
El asturiano, superado en las dos primeras calificaciones del año por su compañero paulista, intentará que las aguas vuelvan a su cauce en Shanghái, circuito de 5.451 metros en el que ganó en 2005 -el año de su primer Mundial (con Renault)- y fue segundo las dos temporadas siguientes, pero donde desde entonces no ha vuelto a subir al podio.
El año pasado el ovetense acabó noveno en China. Alonso intentará mejorar con creces ese resultado, en la décima edición de un Gran Premio que está previsto a 56 vueltas, para completar un recorrido de 305 kilómetros.
ALONSO OPTA AL PODIO
Fernando Alonso (Ferrari) aseguró en Shanghái que su objetivo para el domingo es el podio, y que pese a retirarse en la carrera anterior en Malasia, habría acabado noveno o décimo. 'Sobre lo que podríamos haber hecho allí, es difícil saberlo siempre', dijo, pero según 'las simulaciones que hicimos después de la carrera, si hubiésemos parado en la primera vuelta, habríamos acabado novenos o décimos', señaló.
'Kimi (Räikkönen, de Lotus), que tenía un ritmo fantástico, y que no tuvo ningún problema en carrera, acabó séptimo, por tanto no es que yo pudiese acabar demasiado más arriba', recordó.
El piloto de Ferrari también aprovechó para elogiar a su compañero, Massa: ' Creo que está haciendo un trabajo fantástico, Felipe está conduciendo al cien por cien'.
El español comentó también cómo puede favorecer a Ferrari la rivalidad en Red Bull y aseguró en una situación similar no había superado a su compañero de equipo durante la carrera. 'Supongo que reaccionaría manteniendo la posición: al final te paga tu equipo, y tienes que hacer más o menos lo que te digan, todos trabajamos en algo', opinó.
Merced a su tercer puesto de Australia, el alemán encabeza el Mundial con 40 puntos, nueve más que el finlandés Kimi Raikkonen (Lotus) -vencedor en Melbourne- y con 14 sobre Webber.
Alonso es sexto en el campeonato, con 18 puntos, cuatro menos que su compañero brasileño Felipe Massa, quinto, tras acabar en ese puesto en Malasia, donde el mexicano Sergio Pérez estrenó su casillero con McLaren. 'Checo' fue noveno y suma dos puntos, los mismos que su compañero inglés Jenson Button.
El asturiano, superado en las dos primeras calificaciones del año por su compañero paulista, intentará que las aguas vuelvan a su cauce en Shanghái, circuito de 5.451 metros en el que ganó en 2005 -el año de su primer Mundial (con Renault)- y fue segundo las dos temporadas siguientes, pero donde desde entonces no ha vuelto a subir al podio.
El año pasado el ovetense acabó noveno en China. Alonso intentará mejorar con creces ese resultado, en la décima edición de un Gran Premio que está previsto a 56 vueltas, para completar un recorrido de 305 kilómetros.
ALONSO OPTA AL PODIO
Fernando Alonso (Ferrari) aseguró en Shanghái que su objetivo para el domingo es el podio, y que pese a retirarse en la carrera anterior en Malasia, habría acabado noveno o décimo. 'Sobre lo que podríamos haber hecho allí, es difícil saberlo siempre', dijo, pero según 'las simulaciones que hicimos después de la carrera, si hubiésemos parado en la primera vuelta, habríamos acabado novenos o décimos', señaló.
'Kimi (Räikkönen, de Lotus), que tenía un ritmo fantástico, y que no tuvo ningún problema en carrera, acabó séptimo, por tanto no es que yo pudiese acabar demasiado más arriba', recordó.
El piloto de Ferrari también aprovechó para elogiar a su compañero, Massa: ' Creo que está haciendo un trabajo fantástico, Felipe está conduciendo al cien por cien'.
El español comentó también cómo puede favorecer a Ferrari la rivalidad en Red Bull y aseguró en una situación similar no había superado a su compañero de equipo durante la carrera. 'Supongo que reaccionaría manteniendo la posición: al final te paga tu equipo, y tienes que hacer más o menos lo que te digan, todos trabajamos en algo', opinó.
