El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero reiteró al Congreso su intención de culminar las reformas pendientes y de completar la tramitación de proyectos de ley que están en las Cortes y admitió que la recuperación económica será 'lenta' y que la reducción del déficit necesitará del concurso de comunidades y ayuntamientos.
En la comunicación registrada en el Congreso para solicitar la celebración del Debate sobre el Estado de la Nación, el Gobierno subraya que en esta última parte de la legislatura piensa centrarse en 'la culminación del ambicioso proceso de reformas emprendido'.
Ello implica 'desde la adopción de nuevas iniciativas para completar dicho proceso, hasta la aprobación definitiva de diversas leyes pendientes de tramitación, pasando por el desarrollo reglamentario y aplicación de las ya vigentes'. Además, reafirma su deseo de 'culminar su agenda legislativa sobre la ampliación de los derechos cívicos y sociales'.
Eso sí, recuerda que 'resulta también indispensable seguir ejecutando sin interrupción, al ritmo y de acuerdo con los compromisos asumidos, el programa de reducción del déficit público', que para el año 2011 tiene como objetivo el 6% del PIB, 'lo que supone rebajar ese déficit en 32.000 millones adicionales'.
En su balance del año, el Gobierno reconoce que todo ha estado 'marcado decisivamente por la crisis económica'. 'Y si bien es cierto que, durante este tiempo, se ha confirmado el tránsito de la recesión a la recuperación, esta evolución favorable del crecimiento, aún demasiado lenta, no ha producido el efecto deseable en la reducción del desempleo, que permanece en tasas inasumiblemente altas', diagnostica.
Ello implica 'desde la adopción de nuevas iniciativas para completar dicho proceso, hasta la aprobación definitiva de diversas leyes pendientes de tramitación, pasando por el desarrollo reglamentario y aplicación de las ya vigentes'. Además, reafirma su deseo de 'culminar su agenda legislativa sobre la ampliación de los derechos cívicos y sociales'.
Eso sí, recuerda que 'resulta también indispensable seguir ejecutando sin interrupción, al ritmo y de acuerdo con los compromisos asumidos, el programa de reducción del déficit público', que para el año 2011 tiene como objetivo el 6% del PIB, 'lo que supone rebajar ese déficit en 32.000 millones adicionales'.
En su balance del año, el Gobierno reconoce que todo ha estado 'marcado decisivamente por la crisis económica'. 'Y si bien es cierto que, durante este tiempo, se ha confirmado el tránsito de la recesión a la recuperación, esta evolución favorable del crecimiento, aún demasiado lenta, no ha producido el efecto deseable en la reducción del desempleo, que permanece en tasas inasumiblemente altas', diagnostica.
