El Ibex 35 se ha precipitado un 2,1% al cierre de mercado y se ha desinflado hasta los 8.558,1 puntos, lastrado por el castigo sufrido por la banca, sobre todo la mediana, el mismo día en el que se volvían a permitir las posiciones cortas prohibidas desde agosto de 2011.
Coincidiendo con el aval del Congreso a la reforma financiera para sanear los balances bancarios, BBVA y Santander perdieron un 4,09% y un 2,56%, respectivamente.
El mayor recorte lo protagonizó Bankia, que se precipitó un 7,28%. Le siguieron Caixabank (-6,22%), Popular (-6,18%) y Sabadell (-5,97%). Con ello, el selectivo ha liderado las caídas en el Viejo Continente, seguido de lejos por la Bolsa de Lisboa, que se dejó un 1,2%.
En el mercado de deuda pública, la prima de riesgo española se relajaba hasta los 347 puntos básicos, tras arrancar la sesión cerca de los 380 puntos.
El mayor recorte lo protagonizó Bankia, que se precipitó un 7,28%. Le siguieron Caixabank (-6,22%), Popular (-6,18%) y Sabadell (-5,97%). Con ello, el selectivo ha liderado las caídas en el Viejo Continente, seguido de lejos por la Bolsa de Lisboa, que se dejó un 1,2%.
En el mercado de deuda pública, la prima de riesgo española se relajaba hasta los 347 puntos básicos, tras arrancar la sesión cerca de los 380 puntos.