La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, ha afirmado hoy que votará el próximo junio por Mariano Rajoy como líder del PP, aunque ha evitado definir como inamovible su decisión de no presentar una candidatura alternativa cuando aún faltan dos meses para el Congreso Nacional del partido.
Durante su intervención en el programa de TVE 59 segundos, ha apuntado además que el partido puede designar a su candidato a la presidencia del Gobierno después de los comicios autonómicos de 2011, porque, según los estatutos del PP, habrá de ser elegido por la Junta Directiva en su momento y se debe celebrar un nuevo Congreso Nacional dentro de tres años.
No he llamado ni a uno siquiera de los compromisarios natos o electos para pedir el voto, porque no ha entrado en mi cabeza presentarme a una candidatura alternativa al presidente, ha subrayado Aguirre, si bien ha puntualizado que no puede decir de este agua no beberé cuando no se sabe lo que puede pasar en los dos meses que faltan para el cónclave de junio.
La presidenta del PP de Madrid y del Gobierno regional madrileño ha insistido en que no reclama un debate ideológico interno en su partido, sino con el PSOE, y ha destacado las declaraciones hechas esta tarde en nombre de Rajoy para decir que nunca se le ha pasado por la imaginación que ella se fuera del partido.
Tras dejar claro que no desea adhesiones inquebrantables ni para los demás ni para ella, Aguirre ha advertido de que no es bueno que el líder del PP tenga que presentar a su equipo 12 horas antes del comienzo del Congreso Nacional y ha llamado a reflexionar sobre las causas de la derrota electoral del 9 de marzo, la segunda de Rajoy en unas elecciones generales.
No se sabe si no hay dos sin tres o si a la tercera va la vencida, ha añadido sobre las posibilidades de Rajoy en una tercera competición electoral.
Aguirre cree que puede ser este el momento más crítico para el PP desde su refundación, como opina Jaime Mayor Oreja, y comparte absolutamente el análisis de Francisco Alvarez Cascos cuando sostiene que no es un partido de barones, porque serán los compromisarios quienes decidan la futura dirección sin dejarse condicionar por el criterio de los líderes regionales.
También entiende que Cascos pueda pensar que Rajoy ha optado por los afines frente a los más preparados, porque en el grupo parlamentario del PP hay gentes muy preparadas que se han quedado sin cargo.
En este sentido, ha elogiado el ejemplo extraordinario de Manuel Pizarro, que abandonó sus responsabilidades empresariales para ser candidato a diputado del PP, y se ha mostrado convencida de que Rajoy le ofrecerá algún puesto en el Congreso del partido.
En respuesta implícita al líder del partido, Aguirre ha recalcado que se considera liberal precisamente por la preocupación social que siente y ha subrayado que el PP debe comunicar mejor y también quizás poner al día la manera de presentar sus valores.
No quiero ser presidenta del Gobierno, mis ambiciones están más que satisfechas, ha insistido en todo momento, y ha contrastado esta actitud con la del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que legítimamente, lleva muchos años diciendo que sí aspira a ese cargo.
Aguirre reconoce roces y discrepancias con Ruiz-Gallardón, aunque cree que están de acuerdo en lo fundamental y no tienen mal 'feeling' en lo personal, al tiempo que comparte la opinión de Mario Vargas Llosa de que la rivalidad entre el alcalde y la presidenta es buena para los madrileños.
Ha restado también importancia a las críticas del secretario de Comunicación del Partido Popular de Madrid, Juan José Güemes, al PP andaluz y ha destacado que se referían sólo al secretario general de esta formación, autor de unas declaraciones contra ella.
En todo caso, la presidenta del PP de Madrid no ha querido cerrar su participación en el programa de TVE con una declaración expresa de que su renuncia a liderar el partido en junio es inamovible y ha parafraseado a Rajoy para añadir la coletilla: o no... o sí....