Las empresas gallegas impulsan las exportaciones y venden más en el extranjero, sobre todo Latinoamérica
El textil gallego da puntadas para salir a flote. 2014 apunta a ser el primer año de la crisis en el que las ventas crecieron, un 3% en el conjunto de España y similar en Galicia, según estima la patronal nacional Acotex. "No es un gran crecimiento, pero implica que el consumo se estabiliza. No olvidemos que venimos de años de caídas de dos dígitos", explica Alberto Rocha, secretario general del Clúster Gallego Textil Moda (Cointega).
El sector es realista y no prevé grandes incrementos a corto plazo, si bien apunta a que las expectativas son de mejoría y constata cambios en los hábitos de compra y del consumidor. "Se ha instalado la mentalidad del precio y de la compra más racional, que lógicamente merma las ventas. Es lo que se llama la compra de la postguerra. Por otra parte, el segmento de gente joven siempre ha sido muy interesante pero ahora hay mucho paro juvenil o tienen menos poder adquisitivo", explica Rocha.
Cointega sostiene que la clave para el sector está en diversificar y vender en el extranjero. "Las exportaciones siguen en aumento y las pymes cada vez se esfuerzan más para jugar en esta liga porque saben lo importante que es", señala. Europa es el principal mercado del textil gallego y las compañías están apostando cada vez más por China por su potencial. "Los empresarios son realistas con la situación de país y las expectativas de crecimiento". Latinoamérica es el otro gran mercado con México y Colombia a la cabeza y son muchas las empresas gallegas que tienen presencia en esa zona como Pili Carrera, Nanos, Foque, Paz Rodríguez, Inditex, Bimba&Lola, Selmark, Florentino, Dorrego&Novoa, Textil Lonia, Adolfo Domínguez o Roberto Verino, entre otras.
Otro ejemplo de empresas referentes es el de la viguesa Naffta, que acaba de conseguir un contrato con la Federación Nacional de Tenis para suministrar ropa deportiva a sus equipos, incluido el de la Copa Davis. La compañía está viviendo ahora una nueva etapa tras ser rescatada en 2013 cuando estaba en liquidación por un grupo de empresarios. "Lo de Naffta tiene mucho mérito porque rescatar una marca, relanzarla e inyectar capital con socios nuevos no es una tarea sencilla pero demuestra que vieron futuro en esta compañía y que se puede salir y reforzarse", explica Rocha.
La crisis no ha pasado despercibida para el textil, si bien el sector lo capeó "mejor que otros". "En los años más duros hubo cierres, pero a cuentagotas, pero no fueron muy relevantes ni tan traumáticos como en otros sectores", apunta el secretario general de Cointega, que revela que sí se produjeron creación de negocios especialmente en la comarca de Coruña y en Vigo en Porto do Molle. "En los programas de Zona Franca para emprendedores destacan junto con las TIC muchos proyectos del sector con componente tecnológico y eso es muy bueno porque indica que hay futuro", señala.
