'Garantizar que todos los gallegos tengan las mismas oportunidades y servicios, vivan donde vivan, ya sea en el interior o en la costa, en ciudades o en el rural'. En el noveno epígrafe del 'Contrato con Galicia' firmado por Feijóo antes de las elecciones de marzo de 2009, el candidato del PP se comprometía con la cohesión territorial. El reto era complicado. Con el análisis del noveno epígrafe, continuamos el balance del grado de cumplimiento del 'contrato', siguiendo la invitación cursada en aquel momento por el líder del PP y que esperaba superar con una nota 'no inferior a sobresaliente'.
Para cumplir con lo prometido, el Gobierno de Feijóo acometió, a traves del engranaje del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), los planes Impulsa Ourense e Impulsa Lugo, que pretendían ser el 'motor' de las dos provincias. La Xunta recurrió a varios planes de financiación, tanto del Igape como del Banco Europeo de Investimentos (BEI). En la página web de los dos planes no hay un apartado en el que rece la cuantía específica de los dos Impulsa, el modelo de financiación y el grado de ejecución. Incluso en las ruedas de prensa de los miembros del Ejecutivo gallego se dan cifras contradictorias.
Así, el 24 de enero de este año, la última vez que se reunió la comisión de seguimiento en Ourense, el Gobierno autonómico se refería a unas ayudas de '10 millones de euros para las empresas que movilizaron un total de 50 millones de euros en inversiones, según anunció Alfonso Rueda, conselleiro de Presidencia. Curiosamente, en la lista que le fue facilitada a las fuerzas sindicales solo figuraban 2,5 millones. Para explicar el baile de cifras, la Xunta argumentó que esta cantidad correspondía al programa de Grandes Investimentos y, la diferencia, a otros programas incluidos en el Impulsa, pero nunca se llegó a detallar cuáles eran.
En esa reunión también se anunció que se habían creado o mantenido 325 puestos de trabajo, pero nunca se especificó cuántos eran de nueva creación y cuántos se conservaban. En el informe presentado mediante un power point también se hizo referencia a varios proyectos como la autovía de Celanova o el Edificio Judicial, que ya llevaban prometidos muchos años, y que ahora se pretenden vender como Plan Impulsa.
En una nota de prensa del pasado mes de junio se hace referencia a que los Presupuestos de la Xunta correspondientes al 2011 contemplaban 24 millones para el referido plan y 71 millones en los de 2012, pero en el documento no aparece ningún apartado que detalle las inversiones que justifiquen esas cantidades. Las referencias al Impulsa son generalidades.
Desde el Ejecutivo autonómico justifican que las partidas están incluidas en los presupuestos de los diversos departamentos del Ejecutivo, aunque no lleven la denominación Impulsa.El plan de Lugo también está lleno de inconcreciones.
Así, el 24 de enero de este año, la última vez que se reunió la comisión de seguimiento en Ourense, el Gobierno autonómico se refería a unas ayudas de '10 millones de euros para las empresas que movilizaron un total de 50 millones de euros en inversiones, según anunció Alfonso Rueda, conselleiro de Presidencia. Curiosamente, en la lista que le fue facilitada a las fuerzas sindicales solo figuraban 2,5 millones. Para explicar el baile de cifras, la Xunta argumentó que esta cantidad correspondía al programa de Grandes Investimentos y, la diferencia, a otros programas incluidos en el Impulsa, pero nunca se llegó a detallar cuáles eran.
En esa reunión también se anunció que se habían creado o mantenido 325 puestos de trabajo, pero nunca se especificó cuántos eran de nueva creación y cuántos se conservaban. En el informe presentado mediante un power point también se hizo referencia a varios proyectos como la autovía de Celanova o el Edificio Judicial, que ya llevaban prometidos muchos años, y que ahora se pretenden vender como Plan Impulsa.
En una nota de prensa del pasado mes de junio se hace referencia a que los Presupuestos de la Xunta correspondientes al 2011 contemplaban 24 millones para el referido plan y 71 millones en los de 2012, pero en el documento no aparece ningún apartado que detalle las inversiones que justifiquen esas cantidades. Las referencias al Impulsa son generalidades.
Desde el Ejecutivo autonómico justifican que las partidas están incluidas en los presupuestos de los diversos departamentos del Ejecutivo, aunque no lleven la denominación Impulsa.El plan de Lugo también está lleno de inconcreciones.
