El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha iniciado las pruebas con trenes laboratorio en un tramo de 55 kilómetros de la línea de alta velocidad entre Ourense y Santiago, que junto con la conexión con A Coruña, entrará en servicio el próximo 10 de diciembre.
El Ministerio de Fomento ha informado en un comunicado de que el tren laboratorio de Adif ha comenzado a realizar recorridos para verificar el comportamiento dinámico de todos los subsistemas que integran la nueva línea del AVE, como infraestructura de vía, telecomunicaciones, señalización y electrificación.
En la segunda quincena de septiembre está previsto el inicio de las pruebas de verificación y validación del material rodante con trenes S121, que se prolongarán a lo largo del mes de octubre.
El objetivo de estas pruebas es verificar, con anterioridad a su puesta en servicio, la fiabilidad de todos los sistemas tecnológicos que configuran una infraestructura de alta velocidad, para garantizar los parámetros de seguridad y calidad que caracterizan a la red española de alta velocidad.
La línea de alta velocidad Ourense - Santiago - A Coruña entrará en servicio el próximo 10 de diciembre con casi 150 kilómetros de longitud y contribuirá a la vertebración socioeconómica de la comunidad gallega, pues reducirá los actuales tiempos de viaje y mejorará la seguridad con la aplicación de nuevas tecnologías y sistemas de conducción, sostiene Fomento.
La nueva conexión ferroviaria de alta velocidad entre Ourense y Santiago, cuya construcción supondrá una inversión de 2.547 millones de euros, cuenta con hasta 30 túneles y 38 viaductos, por lo que más del 59 por ciento del recorrido discurre en túnel o en viaducto.
Por su parte, agrega la misma nota, entre Santiago y A Coruña se ha llevado a cabo una mejora integral de la línea previamente existente, con duplicaciones de vía y variantes respecto al trazado anterior.
Asimismo, Adif está licitando, por el procedimiento de concurso público convencional, las obras de plataforma que restan por ejecutarse en la línea de alta velocidad Madrid - Galicia en el trayecto comprendido entre Lubián y Ourense, que supondrán una inversión superior a 3.000 millones de euros.
