La inspección detectó, además de falta de personal, errores en la administración de medicamentos

Los ancianos desatendidos de O Grove son realojados en Poio

Exterior de la Residencia Santo Ángel, en la localidad pontevedresa de O Grove. (Foto: SALVADOR SAS)
Los 24 ancianos que serán desalojados por tandas del centro de mayores Santo Ángel de O Grove por deficiencias en su atención serán trasladados a la residencia Vallesol, en Poio, conforme se vaya recibiendo la conformidad de los familiares, informaron fuentes sindicales y de la Xunta. El pasado miércoles fueron trasladados ocho ancianos y en los próximos días está previsto completar el desalojo de la totalidad de los 24 internos del citado geriátrico de O Grove, al que la Consellería de Traballo e Benestar incoó un expediente sancionador y suspendió el concierto de las 22 plazas que mantenía con este centro.
Sara Abeijón, delegada sindical del centro Santo Ángel, explicó que la dirección del centro presentó el pasado día 28 las cartas de suspensión de empleo y sueldo a nueve de las diez trabajadoras de cuidados directos a los ancianos apenas una semana después de que se celebrara un juicio por deudas a la plantilla que se remontan a más de diez meses. Hace dos días, los ancianos quedaron a cargo de una sola cuidadora directa, que había retirado la demanda a la empresa y no fue despedida, y de personal de cocina, limpieza, mantenimiento.

A la vista de los hechos, la Consellería de Traballo eBenestar, que venía investigando la situación laboral de este centro geriátrico de O Grove, acordó como medida cautelar la reubicación de los internos.

La titular del departamento autonómico, Beatriz Mato, subrayó que la Xunta 'no permitirá que una residencia no cumpla con la atención a los mayores' y, con respecto a si se tomará alguna otra medida por lo sucedido en el centro Santo Ángel, señaló que 'en principio, lo que se ha hecho es garantizar la atención de calidad'. La conselleira elogió asimismo el trabajo de los servicios de inspección, que 'dan buena muestra de su profesionalidad' cuando descubren que una residencia 'no atiende como se merecen a los mayores'.

Además de la falta de personal para atender debidamente a los residentes, la inspección también había constatado que 'algunos radiadores' estaban apagados 'incluso en habitaciones donde hay personas encamadas', y la existencia de 'errores en la administración de la medicación', un proceso que no estaba 'siendo realizado ni supervisado por un ATS, informaron los sindicatos.

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