El Ayuntamiento de Lugo cerró el ejercicio económico de 2010 con un superávit de 1,2 millones de euros, lo que eleva el remanente de tesorería de la administración local lucense hasta los 11,2 millones, que serán destinados, al menos en parte, a sufragar la deuda municipal, que asciende a 40 millones.
Al finalizar la Comisión de Cuentas municipal, la concejala de Economía, Sonia Méndez, explicó que el Ayuntamiento de Lugo obtuvo 93.100.000 euros en ingresos, mientras que los gastos ascendieron a 91.900.000 euros, cuando la cifra presupuestada para ambos conceptos era de 92.300.000 euros.
Según Sonia Méndez, esas cifras 'reflejan una economía saneada' en el Ayuntamiento de Lugo, fruto del trabajo 'de un Gobierno responsable, que ha conseguido tener unas cuentas equilibradas tanto en época de bonanza económica como en situación de crisis', mientras que 'otras administraciones están haciendo recortes brutales'.
En ese sentido, Méndez recordó que el Ayuntamiento de Lugo recibió transferencias del Estado por valor de 24,3 millones de euros, mientras que por parte de la Xunta de Galicia sólo llegaron a las arcas municipales 10,6 millones, algo menos de la mitad.
Méndez afirmó que 'la Xunta está abandonando a los ayuntamientos, en particular al de Lugo, ya que sólo proporciona un 11% de su presupuesto'.
Por su parte, el representante del PP en la Comisión de Cuentas, Arcadio Silvosa, criticó que el actual alcalde, el socialista José López Orozco, triplicase el gasto corriente desde su llegada al Ayuntamiento, al pasar de 12,5 millones en el año 2000 a 35,9 millones en 2011, mientras que las inversiones reales cayeron desde el 23 al 9%.
