Tras no usar el turno inicial en la comisión de la agente electoral aducen que sus viajes fueron oficiales y que el voto es libre

El ex alcalde de Carballo y el regidor de Boqueixón no aclaran si gestionaron documentación electoral de emigrantes

Manuel Varela Rey y Adolfo Gacio durante su comparecencia ante la comisión.
El ex alcalde de Carballo Manuel Varela Rey y el regidor de Boqueixón, Adolfo Gacio, ambos del PPdeG, eludieron hoy aclarar si durante sus viajes a la diáspora pidieron a los emigrantes la documentación necesaria para poder tramitar su voto, y los dos se limitaron a remarcar que el sufragio ‘es libre’ y que sus estancias en la Galicia exterior tuvieron carácter ‘oficial’.
En la apertura de la fase de comparecencias de la comisión de investigación sobre una presunta agente electoral socialista, ambos, que se beneficiaron del mismo convenio que la implicada, coincidieron en no hacer apenas uso de su primer turno de intervención, por considerar que no tenían nada que aportar acerca del objeto de la indagación.

‘¿Qué quieren que les diga? Desconozco totalmente este aspecto’, indicó Varela Rey tras leer el título completo del órgano parlamentario. Después de que los grupos parlamentarios formulasen sus preguntas, Valera Rey admitió que viajó ‘habitualmente’ a Montevideo durante los años que gobernó, aunque enfatizó que lo hizo siempre con carácter institucional y no partidario.

Sobre su estancia en la capital uruguaya en marzo de 2003, durante la precampaña de las elecciones municipales, explicó que se valió del convenio del Gobierno gallego con Iberia porque el ayuntamiento estaba atravesando una mala situación económica, al gobernar en minoría y tener los presupuestos prorrogados.

EN CASA DE LA TIA.


Además, minimizó los gastos producidos en este viaje, ya que aseguró que pernoctó en casa de una tía suya ‘muy humilde’ y que lo invitaban a comer y a cenar las distintas asociaciones. ‘No daba hecho’, adujo, y comentó que su actividad principal allí fue la de escuchar los problemas de los residentes ausentes e informarles de las ayudas de la Xunta.

En este sentido, hizo hincapié en lo ‘emotivo’ de estos encuentros y consideró ‘de justicia estar con ellos’. En esta línea, cifró en unos 2.000 los emigrados de Carballo en Montevideo y recalcó que ‘la inmensa mayoría tiene dificultades’. De hecho, señaló que el actual regidor, el nacionalista Evencio Ferrero, también viaja a esta ciudad.

No obstante, el portavoz del BNG, Carlos Aymerich, insistió en que aclarase si durante sus viajes se realizaron comidas en las que se fotocopiaban pasaportes y se gestionó la documentación para ‘recabar’ sufragios a favor del PP. ‘El voto es libre; la gente es mayor y sabe lo que hace’, replicó que el ex regidor, que lamentó que ‘pretendan sembrar dudas’ sobre el funcionamiento de las instituciones.

En este sentido, opinó que se comparecencia en la Cámara es ‘improcedente’ porque sus viajes siempre tuvieron ‘carácter oficial’.

Asimismo, juzgó ‘intolerable’ que ‘pretendan equiparar’ el viaje de un alcalde con el de un agente electoral y señalo que ‘lo más importante es que la instituciones tengan credibilidad’.

ALCALDE DE BOQUEIXON.


Por su parte, el alcalde de Boqueixón, que también fue interrogado en esta misma dirección, replicó que ‘aquí y en Buenos Aires el voto es libre’, aunque admitió estar en precampaña electoral ‘todo el año’. También apuntó que viajan a la emigración alcaldes de todas las formaciones políticas y sugirió que la Xunta aportó ‘información manipulada’ para que el alcalde de Vedra, Odón Cobas, no figurase como beneficiario del convenio que él sí utilizó.

Así, narró que viajaron a la capital argentina juntos entre el 24 y el 31 de mayo de 2007 para asistir a la fusión de dos asociaciones de estos municipios, aunque matizó que no tiene ‘la seguridad’ sobre cómo se financió su estancia. Antes estas insinuaciones, Fernández Leiceaga expresó su malestar, al considerar lo dicho como ‘muy grave’.

A preguntas del propio diputado socialista, admitió que el Ejecutivo autonómico no ejerció ningún tipo de control para garantizar que se habían cumplido los fines de su viajes. Además, se mostró partidario de que los billetes se concedan mediante concurso público y también esgrimió razones económicas para hacer uso de él en su día.

En cualquier caso, Aymerich aseguró tener pruebas documentales, incluso de carácter audiovisual, que prueban que el ex alcalde de Carballo ‘actuó como agente electoral del PP’ en los comicios locales de 1999. Añadió que este comportamiento se reprodujo en posteriores precampañas electorales, incluso en 2003, cuando ya no era candidato a la Alcaldía.

Además, el diputado nacionalista les preguntó si conocía la labor de los agentes electorales y cómo se financian, y avanzó que será una cuestión que plantee a todos los comparecientes en la comisión.

FOTO ALCALDES DEL PP.


Por su parte, el 'popular' Antonio Rodríguez Miranda avaló la postura de los miembros de su partido de no utilizar su primer turno e interpretó su presencia como una estrategia de los grupos que apoyan al Gobierno para tener ‘la foto de dos alcaldes del PP sentados en la comisión’.

De este modo, acusó a socialistas y nacionalistas de tener una ‘doble moral’, por criticar estos viajes cuando, a su juicio, no está claro si el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, está ahora en Argentina con carácter institucional o partidario. También se refirió al vicepresidente, Anxo Quintana, del que comentó que costeó ‘la mayor pulpada de la historia’ de la emigración.

A su vez, el socialista Xaquín Fernández Leiceaga centró sus intervenciones en el convenio con Iberia e ironizó con lo ‘doblemente afortunados’ que resultaron los comparecientes de hoy, al beneficiarse del protocolo justo en periodo preelectoral. No en vano, cuestionó su tramitación, y consideró que su reparto es ‘discrecional’ y no está sometido a control.

Con todo, recalcó en varias ocasiones que el acuerdo tiene ‘coste cero’ para la Xunta, que sólo asumiría ‘pequeños’ gastos en tasas.

Por contra, Aymerich rebatió esta afirmación y apuntó que la Administración gallega paga 24.000 al año a la compañía aérea.

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