La política comercial de la Autoridad Portuaria de Douro, Leixoes y Viana podría tener como principal perjudicado a Vigo.
¿La fusión realizada por el Gobierno de Portugal del puerto de Oporto-Leixoes con el de Viana do Castelo supone una amenaza para los gallegos? El presidente del Puerto de Vigo, Ignacio López-Chaves, prefiere no pronunciarse aunque cree que no tiene por qué afectar, y recuerda que hubo ya intentos en el pasado de integración entre los tres de las rías bajas y los dos de las altas. Por su parte, el empresario Juan Martínez es optimista y resta importancia. "No creo que afecte directamente a Vigo porque Viana crece por la fábrica de eólicos que han instalado al lado y Leixoes tiene su propia dinámica", señaló. No obstante, otras voces advierten del riesgo para la comunidad portuaria gallega donde han fracasado los varios intentos por agrupar los puertos en dos organismos unificados (Rías Baixas y Rías Altas). Podría ser un nuevo "caso aeropuerto": mientras en Galicia hay tres y cada uno compite con el otro, en Portugal sólo hay uno, con el resultado conocido.
En teoría, la política comercial de la Autoridad Portuaria de Douro, Leixoes y Viana podría tener como principal perjudicado a Vigo. A partir de ahora, Portugal sólo dispondrá de un puerto general para toda la Eurorregión, frente a los cinco gallegos de Vigo, A Coruña, Ferrol, Vilagarcía y Marín.
Lo cierto es que Portugal ya ha concentrado en una sola gestión sus terminales para mejorar su capacidad frente a la competencia: los puertos gallegos, y sobre todo Vigo en contenedores y cruceros. Leixoes mueve unos 18 millones en carga al año, la mitad en graneles. Vigo supera los cuatro millones, de ellos 3,5 millones en mercancía, casi toda en contenedores, el 75-80 por ciento de toda Galicia. Leixoes no tiene rival pero su mercado está en el Norte de Portugal y hacia la Meseta gracias a un acuerdo con Salamanca. Vigo tiene otro con Castilla y León. En turismo marítimo, Vigo mueve 200.000 pasajeros por 100.000 de Oporto. Pero la fusión lusa permitirá una mejor gestión de los recursos disponibles; aumentar la operatividad y mejorar los servicios y reducir los costes administrativos y operativos y ganar poder de negociación con proveedores y bancos. n
