El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha enviado a prisión a cuatro de los gallegos detenidos el martes por su presunta implicación en la 'operación Huracán', en la que se intervinieron 2.240 kilos de cocaína, y ha ratificado la prisión acordada el martes para el supuesto jefe del grupo.
En un auto notificado, tras tomar declaración esta mañana a seis de los detenidos en el marco de esta operación contra el narcotráfico, Garzón ha decretado además la puesta en libertad con la obligación de comparecer cada tres días en los juzgados de otros dos de los arrestados: Elisa Ch.R. y Manuel D.V., a quienes impone la prohibición de salir de España.
Los detenidos que ingresarán en prisión, acusados de los delitos de asociación ilícita y contra la salud pública, son Alberto N.F., Angel Manuel B.B., Francisco Javier P.A. y Juan Carlos R.S..
Durante la declaración de los acusados, el fiscal antidroga ha solicitado la prisión para estos cuatro acusados, mientras que para Elisa Ch.R. ha reclamado la prisión eludible bajo fianza de 30.000 euros y comparecencias diarias en el juzgado para Manuel C.V..
El titular del Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional sostiene que los acusados forman parte de un grupo organizado dedicado al tráfico de estupefacientes a gran escala, cuyo supuesto máximo responsable es José N.G., que está en prisión desde el pasado martes y cuya situación ha ratificado hoy Garzón.
De acuerdo con el auto, el presunto jefe del grupo español habría realizado los contactos necesarios para localizar una embarcación pesquera encargada de recoger la droga que transportaba el buque nodriza, el 'Río Manzanares', que fue interceptado en la madrugada del pasado 26 de julio con 2.240 kilos de cocaína, que podría tener un valor en el mercado de más de 73 millones de euros.
Francisco Javier P.A., según el magistrado, representa a la organización colombiana que suministra la droga en España y debía 'asumir' su control para la distribuición, al tiempo que coordinaba toda la operación a través de comunicaciones entre los colombianos y el grupo español.
El sobrino del supuesto responsable de la banda, Alberto N.F., tenía como misión 'mantener los contactos necesarios' con Angel Manuel B.B. y el patrón del barco -que había localizado éste últimoque iría al encuentro del buque nodriza.
La policía ha intervenido a Alberto N.F. y a Angel Manuel B.B. diversa documentación con 'coordenadas, frecuencias y claves coincidentes', que coincide con la aparecida en el 'Río Manzanares' y que 'serían las que darían lugar a la localización del mismo para proceder al trasvase de la droga'.
El auto añade que en poder de Juan Carlos R.S., que mantenía también contacto con José N.G., Francisco Javier P.A. y Manuel D.V. e impartía instrucciones para obtener el barco que se encargaría de la mercancía, se hallaron diversos números de teléfono, entre los que estaba el de uno de los responsables de la organización sudamericana.
La única mujer detenida en esta operación es la esposa de Angel Manuel B.B., que, según el juez, 'habría prestado servicio' a su marido para facilitar las comunicaciones telefónicas con otros miembros del grupo.
Sobre Manuel D.V., Garzón subraya que en este momento no se ha podido concretar 'suficientemente' qué puesto ocuparía en la banda.
Además de la droga incautada en el barco, agrega el magistrado, se intervinieron numerosas coordenadas que describían el rumbo de la embarcación, así como una relación de canales con su código correspondiente, entre los que aparecían los números 80-90 y 80-95.
También aparecían otras claves ('María', 'París' y 'Beatriz') y coordenadas, 'todas ellas coincidentes a las intervenidas a otros miembros de la organización'.
La droga intervenida, concluye la resolución, se encontraba en la cubierta de popa, estibada a babor y estribor, junto con numerosos objetos pesados de hierro, lo que, para Garzón, significa que estaban ahí para arrojar la mercancía al mar en el menor tiempo posible.
Los detenidos que ingresarán en prisión, acusados de los delitos de asociación ilícita y contra la salud pública, son Alberto N.F., Angel Manuel B.B., Francisco Javier P.A. y Juan Carlos R.S..
Durante la declaración de los acusados, el fiscal antidroga ha solicitado la prisión para estos cuatro acusados, mientras que para Elisa Ch.R. ha reclamado la prisión eludible bajo fianza de 30.000 euros y comparecencias diarias en el juzgado para Manuel C.V..
El titular del Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional sostiene que los acusados forman parte de un grupo organizado dedicado al tráfico de estupefacientes a gran escala, cuyo supuesto máximo responsable es José N.G., que está en prisión desde el pasado martes y cuya situación ha ratificado hoy Garzón.
De acuerdo con el auto, el presunto jefe del grupo español habría realizado los contactos necesarios para localizar una embarcación pesquera encargada de recoger la droga que transportaba el buque nodriza, el 'Río Manzanares', que fue interceptado en la madrugada del pasado 26 de julio con 2.240 kilos de cocaína, que podría tener un valor en el mercado de más de 73 millones de euros.
Francisco Javier P.A., según el magistrado, representa a la organización colombiana que suministra la droga en España y debía 'asumir' su control para la distribuición, al tiempo que coordinaba toda la operación a través de comunicaciones entre los colombianos y el grupo español.
El sobrino del supuesto responsable de la banda, Alberto N.F., tenía como misión 'mantener los contactos necesarios' con Angel Manuel B.B. y el patrón del barco -que había localizado éste últimoque iría al encuentro del buque nodriza.
La policía ha intervenido a Alberto N.F. y a Angel Manuel B.B. diversa documentación con 'coordenadas, frecuencias y claves coincidentes', que coincide con la aparecida en el 'Río Manzanares' y que 'serían las que darían lugar a la localización del mismo para proceder al trasvase de la droga'.
El auto añade que en poder de Juan Carlos R.S., que mantenía también contacto con José N.G., Francisco Javier P.A. y Manuel D.V. e impartía instrucciones para obtener el barco que se encargaría de la mercancía, se hallaron diversos números de teléfono, entre los que estaba el de uno de los responsables de la organización sudamericana.
La única mujer detenida en esta operación es la esposa de Angel Manuel B.B., que, según el juez, 'habría prestado servicio' a su marido para facilitar las comunicaciones telefónicas con otros miembros del grupo.
Sobre Manuel D.V., Garzón subraya que en este momento no se ha podido concretar 'suficientemente' qué puesto ocuparía en la banda.
Además de la droga incautada en el barco, agrega el magistrado, se intervinieron numerosas coordenadas que describían el rumbo de la embarcación, así como una relación de canales con su código correspondiente, entre los que aparecían los números 80-90 y 80-95.
También aparecían otras claves ('María', 'París' y 'Beatriz') y coordenadas, 'todas ellas coincidentes a las intervenidas a otros miembros de la organización'.
La droga intervenida, concluye la resolución, se encontraba en la cubierta de popa, estibada a babor y estribor, junto con numerosos objetos pesados de hierro, lo que, para Garzón, significa que estaban ahí para arrojar la mercancía al mar en el menor tiempo posible.
