La cocaína intervenida en el operativo policial al grupo criminal asciende a 2.435 kilos
La operación policial, dirigida y llevada a cabo desde Vigo, que impidió el asentamiento en España de un peligroso cártel colombiano fue calificada ayer como una de las “más importantes contra el tráfico de cocaína que se han realizado en España en los últimos años” con 24 detenidos y un alijo final de 2.435 kilos de cocaína. Así lo afirmó ayer en rueda de prensa en A Coruña, el jefe de la brigada central de estupefacientes, Ricardo Toro, justo antes de hacer hincapié en que, entre los arrestados, se encontraban “personajes bastante importantes dentro del tráfico internacional de cocaína”, en relación a los dos presuntos cabecillas apodados como “El Mono” y “El Loco”. La organización pertenecía a un cártel colombiano de Cúcuta, entre los que se encontraban miembros de la banda de los “Boyacos”.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, presente en la misma comparecencia, calificó la operación como “importantísima”, debido tanto a la cantidad de droga incautada como a la calidad de la investigación.
Según relató, los cárteles colombianos son los principales proveedores de cocaína para el mercado europeo. “Hemos desarticulado dos grupos distintos de colombianos pertenecientes al cártel de Cúcuta”, precisó Ricardo Toro, quien añdió, como tema novedoso, que “los propios dueños de la mercancía se habían desplazado a España hace unos meses y estaban gestionando ellos mismos la distribución de esta cocaína”.
De este modo, los dueños de la mercancía no recurrían a delegados”, pues los españoles detenidos, ninguno de ellos gallegos, se dedicaban a las labores de transporte. Aunque no hay ningún gallego entre los detenidos, las detenciones se produjeron en Galicia, Madrid, San Sebastián y Guadalajara. En concreto, en la Comunidad gallega tuvieron lugar en Vigo, Pontevedra y Padrón, lo que no quiere decir, remarcó, que los detenidos estuviesen establecidos en ese punto, pues "se desplazaban con facilidad". De hecho, las detenciones en Galicia se produjeron cuando transportaban la cocaína. Tal y como adelantó este diario, los arrestados en los distintos puntos gallegos habrían declarado que se encontraban de paso, en concreto, el hombre interceptado en Vigo y natural del País Vasco, alegó que se había desplazado para hacer una gestión, correspondiente a la compra de un vehículo, mientras que el restó declaró o bien que se encontraban por turismo o bien visitando a un amigo.
“Estaban bastante repartidos. Su labor era recoger esta droga que estaba almacenada en distintos puntos y, a través de coches caleteados, es decir, con unos dobles fondos bastante bien construidos, distribuirla en unas cantidades de 200 o 300 kilos a distintas partes de España y Europa", señaló Toro.
La investigación comenzó en junio del año pasado cuando la droga ya estaba en tierra, aunque fue en el último mes cuando se intensificaron las investigaciones.
De todos modos, la Policía Nacional sabe que estos dos grupos planeaban introducir la cocaína por vía marítima, en uno de los casos a través del Puerto de Barcelona, informó el responsable policial.
