Las 535.000 cajetillas de tabaco ilegal incautadas dentro de un contenedor en la terminal portuaria viguesa de Guixar alcanzarían un valor de más de 1,6 millones de euros en el mercado, informaron fuentes de la investigación.
Las mismas fuentes señalaron que las cajetillas de una conocida marca de tabaco estaban apiladas en otras 1.070 cajas que se encontraban camufladas entre cientos de cortinas que estaban siendo transportadas por el contenedor decomisado.
Se sospecha que esas 535.000 cajetillas no iban a ser distribuidas en España, ya que estaban rotuladas en francés, aunque fuentes de la investigación señalaron que tras su paso por el puerto vigués iban rumbo a Barcelona.
Los artífices del hallazgo pertenecen a una unidad de la Aduana de Vigo.
Fuentes de la investigación cifraron en más de 1,6 millones de euros el valor que habría alcanzado la distribución de esas cajetillas, aunque podría, incluso, duplicarse, dependiendo del país destinatario y del precio de esa marca de tabaco.
La descarga del tabaco ilegal se produjo esta mañana en el puerto vigués con la presencia de la secretaria judicial del Juzgado de Guardia de Vigo.
Por el momento, no se han producido detenciones y la investigación continúa abierta.
El contenedor decomisado llevaba en el puerto vigués alrededor de un mes y su carga fue descubierta cuando el pasado 20 de mayo se intentó mover para volverlo a cargar en otro barco dirección a Barcelona.
Se sospecha que esas 535.000 cajetillas no iban a ser distribuidas en España, ya que estaban rotuladas en francés, aunque fuentes de la investigación señalaron que tras su paso por el puerto vigués iban rumbo a Barcelona.
Los artífices del hallazgo pertenecen a una unidad de la Aduana de Vigo.
Fuentes de la investigación cifraron en más de 1,6 millones de euros el valor que habría alcanzado la distribución de esas cajetillas, aunque podría, incluso, duplicarse, dependiendo del país destinatario y del precio de esa marca de tabaco.
La descarga del tabaco ilegal se produjo esta mañana en el puerto vigués con la presencia de la secretaria judicial del Juzgado de Guardia de Vigo.
Por el momento, no se han producido detenciones y la investigación continúa abierta.
El contenedor decomisado llevaba en el puerto vigués alrededor de un mes y su carga fue descubierta cuando el pasado 20 de mayo se intentó mover para volverlo a cargar en otro barco dirección a Barcelona.
