El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago, Luis Aláez, acordó la realización de una prueba pericial judicial sobre las causas del accidente de tren de Angrois, las circunstancias y cualquier otra anomalía, deficiencia o irregularidad en relación al siniestro. Al mismo tiempo, la Policía Judicial realizó una última revisión con perros adiestrados en los vagones del tren accidentado, por si quedara algún resto relevante en su interior.
Asimismo, el Juzgado recibió ya el informe del Instituto Nacional de Toxicología del análisis practicado al maquinista del tren siniestrado el pasado 24 de julio, que concluye que no hay restos de sustancias tóxicas -alcohol o drogas- y solo se detecta en la muestra presencia de cafeína.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSJG), se emplazó a los colegios profesionales y escuelas oficiales de la comunidad para que propongan lo antes posible candidatos a realizar el informe. La intención es que se encarguen del mismo tres ingenieros, uno de Caminos, Canales y Puertos; otro industrial y otro de telecomunicaciones con conocimientos específicos en infraestructuras, material rodante y comunicaciones ferroviarias, si es posible.
El magistrado del caso también ha acordado ayer incorporar al procedimiento, una vez finalizados, los informes sobre el accidente realizados por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios del Ministerio de Fomento, Renfe y Adif..
RASTREO DE LOS VAGONES
Por otro lado, el nuevo rastreo de los vagones del tren siniestrado -cuyos restos están almacenados en una nave ubicada en la parroquia de A Escravitude, dentro del municipio de Padrón- llevado a cabo por la Policía Judicial ayer martes con el apoyo de perros adiestrados se centra en comprobar si queda algún resto.
Según fuentes próximas a la investigación que se está desarrollando sobre este accidente, la de ayer era una inspección rutinaria, en la que participan perros de rastreo, para llevar a cabo una última revisión 'por si pudiera haber quedado algún resto que no se hubiese detectado' hasta el momento.
No obstante, las mismas fuentes han explicado que tras el accidente ya se habían sacado todos los bienes y objetos de valor que, custodiados por la Policía Nacional, se han puesto a disposición de los afectados y familiares para ser retirados. Además, durante las inspecciones pasadas ya se había buscado entre los restos del convoy accidentado el móvil corporativo y el iPad del maquinista que conducía el tren en el momento del siniestro, que hasta ahora siguen sin ser localizados.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSJG), se emplazó a los colegios profesionales y escuelas oficiales de la comunidad para que propongan lo antes posible candidatos a realizar el informe. La intención es que se encarguen del mismo tres ingenieros, uno de Caminos, Canales y Puertos; otro industrial y otro de telecomunicaciones con conocimientos específicos en infraestructuras, material rodante y comunicaciones ferroviarias, si es posible.
El magistrado del caso también ha acordado ayer incorporar al procedimiento, una vez finalizados, los informes sobre el accidente realizados por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios del Ministerio de Fomento, Renfe y Adif..
RASTREO DE LOS VAGONES
Por otro lado, el nuevo rastreo de los vagones del tren siniestrado -cuyos restos están almacenados en una nave ubicada en la parroquia de A Escravitude, dentro del municipio de Padrón- llevado a cabo por la Policía Judicial ayer martes con el apoyo de perros adiestrados se centra en comprobar si queda algún resto.
Según fuentes próximas a la investigación que se está desarrollando sobre este accidente, la de ayer era una inspección rutinaria, en la que participan perros de rastreo, para llevar a cabo una última revisión 'por si pudiera haber quedado algún resto que no se hubiese detectado' hasta el momento.
No obstante, las mismas fuentes han explicado que tras el accidente ya se habían sacado todos los bienes y objetos de valor que, custodiados por la Policía Nacional, se han puesto a disposición de los afectados y familiares para ser retirados. Además, durante las inspecciones pasadas ya se había buscado entre los restos del convoy accidentado el móvil corporativo y el iPad del maquinista que conducía el tren en el momento del siniestro, que hasta ahora siguen sin ser localizados.
