El escenario de la tragedia es un núcleo vecinal de tres casas en la parroquia cañicense de Luneda, a escasos 15 kilómetros del casco urbano de A Cañiza (Pontevedra), en el lugar de Hermida. Los acontecimientos, que causaron una tremenda conmoción en toda la zona, ocurrieron sobre las once de la noche del martes, cuando se produjo uno de los enfrentamiento habituales entre dos vecinos muy mal avenidos desde hacía tiempo, que desembocó en tragedia con la muerte de J.L.G.M, a causa de una pedrada en la cabeza.
La vecina implicada, que al parecer iba al volante de su coche, se encontró con la víctima, que transitaba por un camino con sus perros. Cuando ambos se cruzaron a unos 20 metros de las viviendas, el hombre -en uno de los habituales gestos inamistosos hacia su vecina- supuestamente golpeó el vehículo con un bastón y fue increpado por la conductora que a continuación le lanzó una piedra causándole una herida mortal en la cabeza, según confirmaron fuentes de la Subdelegación de Gobierno. La víctima, de 62 años, que vivía con su mujer, quedó tendida en el suelo sobre un charco de sangre. Los servicios sanitarios intentaron reanimarle durante casi una hora, sin conseguirlo.
La agresora, S.E.N., de 33 años, natural de Abelenda (Arbo), casada y madre de un niño de 9, fue detenida por la Guardia Civil sobre las 23,40 horas del martes y trasladada ante un juez de Ponteareas. Posteriormente fue ingresada en la unidad de psiquiatría del Meixoeiro, donde seguía anoche. Pero la tragedia continuó más tarde, de mañana, cuando el marido de la agresora, horas después, era encontrado sin vida en el galpón de la vivienda familiar, colgado de una viga.
El alcalde de A Cañiza, Miguel Domínguez, en declaraciones a este diario, lamentaba profundamente que 'una rencilla vecinal hubiese terminado en una tragedia así, destrozando a dos familias'. El suceso causó un impacto tremendo en toda la comarca.
La agresora, S.E.N., de 33 años, natural de Abelenda (Arbo), casada y madre de un niño de 9, fue detenida por la Guardia Civil sobre las 23,40 horas del martes y trasladada ante un juez de Ponteareas. Posteriormente fue ingresada en la unidad de psiquiatría del Meixoeiro, donde seguía anoche. Pero la tragedia continuó más tarde, de mañana, cuando el marido de la agresora, horas después, era encontrado sin vida en el galpón de la vivienda familiar, colgado de una viga.
El alcalde de A Cañiza, Miguel Domínguez, en declaraciones a este diario, lamentaba profundamente que 'una rencilla vecinal hubiese terminado en una tragedia así, destrozando a dos familias'. El suceso causó un impacto tremendo en toda la comarca.
