El portavoz de la asociación de vecinos 'El Mirador' de Monteporreiro, Angel Mario Lago, aseguróque 'no se toman en serio' las propuestas de Sinaí Giménez, presidente de la Asociación del Pueblo Gitano, porque nunca le han reconocido como un interlocutor válido, de manera que rechazan 'realojar' a una familia a cambio de que retiren las denuncias.
El dirigente de la asociación ofreció retirar las denuncias y no presentarse como acusación particular contra los vecinos de Monteporreiro imputados a cambio del realojo de una de las familias expulsadas de este barrio, concretamente la que residía en un piso de la calle Portugal.
La Asociación del Pueblo Gitano recordó, asimismo, que esta familia nunca se ha visto inmersa en ningún tipo de conflicto, ni ha presentado tampoco problemas de convivencia.
Por su parte, Angel Mario Lago afirmó que Sinaí Jiménez 'o no tiene muchos fundamentos para la acusación que hizo y no está muy convencido, o pasa de la justicia, de las instituciones y pasa de todo', dijo.
Además el portavoz de los vecinos de Monteporreiro destacó que Sinaí Giménez 'forma parte de una mesa de negociación para dar salida a estos realojos' por lo que aseguró 'no entender a que viene hacer esta propuesta ahora'.
UTILIZAR AL ANTOJO LAS ADMINISTRACIONES.
'Da la sensación de que este señor utiliza la Constitución a su antojo, a las administraciones cuando le conviene y a la justicia cuando le apetece', concluyó el dirigente vecinal.
Angel Mario Lago realizó estas declaraciones tras comparecer ante la jueza titular del juzgado de instrucción número 1 de Pontevedra, junto a otros cuatro vecinos de Monteporreiro, imputados por un supuesto delito de coacciones a las familias gitanas que fueron realojadas en este barrio pontevedrés.
Estos imputados consideraron 'positivo' que la jueza apenas hubiese formulado preguntas y que no estuviese presente ningún representante del ministerio fiscal ni siquiera el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, que meses atrás había llegado a la conclusión de que existen indicios delictivos en la actitud que mostraron algunos vecinos.
COMPARECENCIAS.
Los primeros en comparecer fueron los dirigentes vecinales Angel Mario Lago y José María Dopazo, quienes aclararon algunas de las declaraciones efectuadas durante las movilizaciones ante los medios de comunicación.
Esta situación se inició a raíz de la denuncia interpuesta por Sinaí Giménez, presidente de la Asociación del Pueblo Gitano, en la que relataba unas presuntas amenazas públicas.
Además el colectivo gitano apuntó que estos dos dirigentes vecinales podrían haber incurrido en un delito de fomento de la violencia en referencia a unas declaraciones aparecidas en los medios, así como a lo que definió Sinaí Giménez como 'acoso' a las familias con movilizaciones a las dos de la mañana con petardos.
La Asociación del Pueblo Gitano recordó, asimismo, que esta familia nunca se ha visto inmersa en ningún tipo de conflicto, ni ha presentado tampoco problemas de convivencia.
Por su parte, Angel Mario Lago afirmó que Sinaí Jiménez 'o no tiene muchos fundamentos para la acusación que hizo y no está muy convencido, o pasa de la justicia, de las instituciones y pasa de todo', dijo.
Además el portavoz de los vecinos de Monteporreiro destacó que Sinaí Giménez 'forma parte de una mesa de negociación para dar salida a estos realojos' por lo que aseguró 'no entender a que viene hacer esta propuesta ahora'.
UTILIZAR AL ANTOJO LAS ADMINISTRACIONES.
'Da la sensación de que este señor utiliza la Constitución a su antojo, a las administraciones cuando le conviene y a la justicia cuando le apetece', concluyó el dirigente vecinal.
Angel Mario Lago realizó estas declaraciones tras comparecer ante la jueza titular del juzgado de instrucción número 1 de Pontevedra, junto a otros cuatro vecinos de Monteporreiro, imputados por un supuesto delito de coacciones a las familias gitanas que fueron realojadas en este barrio pontevedrés.
Estos imputados consideraron 'positivo' que la jueza apenas hubiese formulado preguntas y que no estuviese presente ningún representante del ministerio fiscal ni siquiera el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, que meses atrás había llegado a la conclusión de que existen indicios delictivos en la actitud que mostraron algunos vecinos.
COMPARECENCIAS.
Los primeros en comparecer fueron los dirigentes vecinales Angel Mario Lago y José María Dopazo, quienes aclararon algunas de las declaraciones efectuadas durante las movilizaciones ante los medios de comunicación.
Esta situación se inició a raíz de la denuncia interpuesta por Sinaí Giménez, presidente de la Asociación del Pueblo Gitano, en la que relataba unas presuntas amenazas públicas.
Además el colectivo gitano apuntó que estos dos dirigentes vecinales podrían haber incurrido en un delito de fomento de la violencia en referencia a unas declaraciones aparecidas en los medios, así como a lo que definió Sinaí Giménez como 'acoso' a las familias con movilizaciones a las dos de la mañana con petardos.
