El secretario xeral de Calidade e Avaliación Ambiental de la Xunta, Justo de Benito, aseguró que los mecanismos legales 'garantizan' la 'independencia' y el 'rigor técnico' del órgano destinado a la protección de la naturaleza dentro de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras.
Por ello, criticó los 'prejuicios' del PSdeG al 'dudar de que el Gobierno autonómico vaya a supeditar la política medioambiental a las obras públicas', tal y como auguró la diputada Carmen Gallego en la comisión de Ordenación Territorial.
Frente a esto, Justo de Benito defendió que la inclusión de las políticas medioambientales en el departamento encargado de las obras públicas hace que salga 'reforzada' la protección de la naturaleza. 'Los ámbitos de ordenación del territorio e infraestructuras quedan sometidos a ella', insistió.
Del mismo modo, rechazó que la nueva estructura 'implique una rebaja en el nivel de exigencia de los procedimientos de evaluación de impacto ambiental de los proyectos públicos'.
Además, a los mecanismos legales existentes para 'garantizar' la 'independencia' del órgano ambiental añadió la publicidad y la transparencia como 'herramientas para mantenerla'; así como la coordinación con el resto de políticas sectoriales de la Xunta mediante el Comité Interdepartamental de Desenvolvemento Sostible creado en 2006 'y que sólo se reunió una vez'.
CRITERIO COMUNITARIO
Por su parte, la diputada socialista por Pontevedra reiteró sus críticas por la fusión en una misma consellería de las obras públicas y el medio ambiente, puesto que, a su juicio, este departamento 'de Medio Ambiente sólo tiene el nombre'.
A mayores, enfatizó que 'la Unión Europea aconseja separar el órgano promotor de obra del medioambiental, aunque no del de la ordenación del territorio', al tiempo que señaló 'que casi todas las comunidades de España lo tienen separado'.
De hecho, Asturias es la única comunidad, según un documento que mostró Carmen Gallego que cuenta con un departamento con una denominación 'muy similar' a la del gallego, la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras.
Tras esta constatación, reprobó que el PP, 'en aras de una austeridad mal entendida, sacrifique las políticas medioambientales con las que Galicia estaba a la vanguardia en España'.
Frente a esto, Justo de Benito defendió que la inclusión de las políticas medioambientales en el departamento encargado de las obras públicas hace que salga 'reforzada' la protección de la naturaleza. 'Los ámbitos de ordenación del territorio e infraestructuras quedan sometidos a ella', insistió.
Del mismo modo, rechazó que la nueva estructura 'implique una rebaja en el nivel de exigencia de los procedimientos de evaluación de impacto ambiental de los proyectos públicos'.
Además, a los mecanismos legales existentes para 'garantizar' la 'independencia' del órgano ambiental añadió la publicidad y la transparencia como 'herramientas para mantenerla'; así como la coordinación con el resto de políticas sectoriales de la Xunta mediante el Comité Interdepartamental de Desenvolvemento Sostible creado en 2006 'y que sólo se reunió una vez'.
CRITERIO COMUNITARIO
Por su parte, la diputada socialista por Pontevedra reiteró sus críticas por la fusión en una misma consellería de las obras públicas y el medio ambiente, puesto que, a su juicio, este departamento 'de Medio Ambiente sólo tiene el nombre'.
A mayores, enfatizó que 'la Unión Europea aconseja separar el órgano promotor de obra del medioambiental, aunque no del de la ordenación del territorio', al tiempo que señaló 'que casi todas las comunidades de España lo tienen separado'.
De hecho, Asturias es la única comunidad, según un documento que mostró Carmen Gallego que cuenta con un departamento con una denominación 'muy similar' a la del gallego, la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras.
Tras esta constatación, reprobó que el PP, 'en aras de una austeridad mal entendida, sacrifique las políticas medioambientales con las que Galicia estaba a la vanguardia en España'.
