El rapero estadounidense T.I. ingresó en la prisión de Forrest City (Arkansas, EEUU), donde cumplirá una condena de un año y un día por posesión ilegal de armas, confirmaron hoy las autoridades a los medios locales.
Dos días después de despedirse de sus seguidores en un último concierto en su ciudad natal, Atlanta, y 30 minutos después de la hora límite fijada por las autoridades, T.I. ingresó en la prisión en una furgoneta con cristales oscuros y matrícula de Georgia.
A finales de marzo T.I. fue declarado culpable de tratar de comprar ametralladoras y munición a agentes secretos en 2007.
El tres veces ganador del Grammy, que cuenta con antecedentes penales por distribución de cocaína, fue arrestado en octubre de ese año a la entrada de los premios de hip-hop BET y permaneció dos semanas en la cárcel después de que la policía encontró pistolas y rifles en su vehículo y vivienda.
Aunque las leyes federales establecen un tiempo de condena mínimo de cuatro años y nueve meses en los casos de posesión ilegal de armas, el equipo legal de T.I. llegó a un acuerdo con el juzgado para reducir la condena, con el alegato de que la estrella del rap había cumplido cientos de horas de servicio comunitario.
Una vez finalice su condena, T.I., que en el último año ha viajado a 25 Estados y ha hablado ante niños y jóvenes de 58 colegios sobre sus errores, deberá cumplir otras 470 horas de servicio comunitario, pagará una multa de 100.000 dólares (71.901 euros) y permanecerá en libertad condicional durante tres años.
La policía de Forrest City bloqueó hoy la principal carretera de entrada a la prisión, en un intento por minimizar la expectación que ha causado entre la prensa la inminente llegada del llamado Rey del sur.
En un concierto en Atlanta, el domingo, T.I. aseguró a un público de unas 16.000 personas que mantendría el optimismo durante la condena.
Voy a mantener la cabeza alta, dijo el cantante ante la multitud, que enarbolaba pancartas en las que podían leerse frases como T.I., te echaremos de menos.
El rapero, de 28 años, cuyo verdadero nombre es Clifford Harris, subió al escenario acompañado de sus cinco hijos, cantó algunos de los temas con uno de ellos en brazos y agradeció constantemente el apoyo de sus seguidores.
Tras interpretar todos sus grandes éxitos y ofrecer un dúo con el joven rapero Soulja Boy, T.I. abandonó el mayor pabellón de Atlanta con una última petición a sus seguidores.
Necesito que recen por mí mientras no estoy, dijo. Los veré dentro de 366 días.
Los problemas con la ley no han afectado a las ventas del rapero, que en septiembre del año pasado comercializó más de medio millón de copias en la primera semana en el mercado de su sexto disco, Paper Trail, que compuso bajo arresto domiciliario.
A finales de marzo T.I. fue declarado culpable de tratar de comprar ametralladoras y munición a agentes secretos en 2007.
El tres veces ganador del Grammy, que cuenta con antecedentes penales por distribución de cocaína, fue arrestado en octubre de ese año a la entrada de los premios de hip-hop BET y permaneció dos semanas en la cárcel después de que la policía encontró pistolas y rifles en su vehículo y vivienda.
Aunque las leyes federales establecen un tiempo de condena mínimo de cuatro años y nueve meses en los casos de posesión ilegal de armas, el equipo legal de T.I. llegó a un acuerdo con el juzgado para reducir la condena, con el alegato de que la estrella del rap había cumplido cientos de horas de servicio comunitario.
Una vez finalice su condena, T.I., que en el último año ha viajado a 25 Estados y ha hablado ante niños y jóvenes de 58 colegios sobre sus errores, deberá cumplir otras 470 horas de servicio comunitario, pagará una multa de 100.000 dólares (71.901 euros) y permanecerá en libertad condicional durante tres años.
La policía de Forrest City bloqueó hoy la principal carretera de entrada a la prisión, en un intento por minimizar la expectación que ha causado entre la prensa la inminente llegada del llamado Rey del sur.
En un concierto en Atlanta, el domingo, T.I. aseguró a un público de unas 16.000 personas que mantendría el optimismo durante la condena.
Voy a mantener la cabeza alta, dijo el cantante ante la multitud, que enarbolaba pancartas en las que podían leerse frases como T.I., te echaremos de menos.
El rapero, de 28 años, cuyo verdadero nombre es Clifford Harris, subió al escenario acompañado de sus cinco hijos, cantó algunos de los temas con uno de ellos en brazos y agradeció constantemente el apoyo de sus seguidores.
Tras interpretar todos sus grandes éxitos y ofrecer un dúo con el joven rapero Soulja Boy, T.I. abandonó el mayor pabellón de Atlanta con una última petición a sus seguidores.
Necesito que recen por mí mientras no estoy, dijo. Los veré dentro de 366 días.
Los problemas con la ley no han afectado a las ventas del rapero, que en septiembre del año pasado comercializó más de medio millón de copias en la primera semana en el mercado de su sexto disco, Paper Trail, que compuso bajo arresto domiciliario.
