Una semana más, la familia Thyssen ocupa páginas de las revistas del corazón. Esta vez la protagonista es Tita Cervera quien, tras las amenazas de demanda de su hijo Borja por no informarle sobre sus bienes, decidió reunirse con sus abogados con la intención de llegar a un acuerdo con su primogénito y evitar una batalla legal.
Con el semblante serio y muy afectada, la baronesa visitó el museo Thyssen junto a su gabinete jurídico para ponerles al día de las disputas familiares. Según fuentes de 'Diez Minutos', Tita estaría tranquila a pesar de todo el revuelo, pues, al parecer, los títulos de propiedad que Borja dice tener sobre determinados cuadros no existen y sus pretensiones no son legítimas porque no podría probarlas con documentos.
Mientras, Borja continúa desmintiendo que haya comenzado esta batalla contra su madre porque esté en un mal momento económico. Sin embargo, la publicación informa de una posible deuda de 2,9 millones de euros con la sociedad Cas Capeto S.L, de la que su mujer, Blanca Cuesta, es administradora única. Por el momento, según dice, lo que realmente le preocupa es la mala relación que sigue habiendo con Carmen, asegurando que ella 'aún no se ha puesto en contacto' ni con él ni con su esposa.
Mientras, Borja continúa desmintiendo que haya comenzado esta batalla contra su madre porque esté en un mal momento económico. Sin embargo, la publicación informa de una posible deuda de 2,9 millones de euros con la sociedad Cas Capeto S.L, de la que su mujer, Blanca Cuesta, es administradora única. Por el momento, según dice, lo que realmente le preocupa es la mala relación que sigue habiendo con Carmen, asegurando que ella 'aún no se ha puesto en contacto' ni con él ni con su esposa.
