Medio centenar de grupos de medios de comunicación mexicanos condenaron hoy el secuestro del periodista Humberto Millán Salazar ocurrido ayer en Culiacán, norte de México, y exigieron su 'pronta localización'.
Los grupos firmantes, que en conjunto poseen más de 700 empresas periodísticas, son los mismos que el 24 de marzo firmaron el Acuerdo para la Cobertura Informativa de la Violencia (ACIV), que pretende 'consignar los hechos con valor periodístico y a la vez limitar los efectos estrictamente propagandísticos de los mismos' en México.
Millán fue secuestrado el miércoles a alrededor de las seis de la mañana hora local (12.00 GMT) en el norte de Culiacán, según datos de la fiscalía estatal, por un grupo de personas armadas que se desplazaban a bordo de dos camionetas.
Al parecer el periodista fue víctima de un 'levantón', como se conoce en este país a una acción de los grupos criminales consistente en capturar a una o varias personas sin exigir rescate a cambio.
Es común que las víctimas de estas acciones aparezcan muertas horas o días después.
En el mensaje publicado en varios medios y firmado por el Observatorio de los Procesos de Comunicación Pública de la Violencia (OPCPV), manifiestan su 'solidaridad al diario digital 'A Discusión', al Grupo Fórmula, a los colegas en el estado de Sinaloa' y a los familiares y amigos de Millán.
En el comunicado se destaca que periodista tiene 'más de treinta años de trayectoria' profesional, y se exige a las autoridades mexicanas, federales, estatales y municipales, 'tomar inmediatamente todas las medidas necesarias para localizar en buen estado de salud a Humberto'.
También solicitan la apertura de unas investigaciones 'diligentes y efectivas' en torno al caso, y que 'se restablezcan en el país las condiciones necesarias para el ejercicio periodístico, elemento indispensable para la vida democrática'.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), unos 71 periodistas han perdido la vida desde 2000 en México, que se ha convertido en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer esta profesión.
Muchos de los casos están relacionados con acciones de la delincuencia organizada, contra la cual el Gobierno del presidente Felipe Calderón mantiene desde diciembre de 2006 una estrategia de combate frontal con el Ejército a la vanguardia.
