Dos civiles palestinos de la misma familia murieron hoy en los bombardeos aéreos israelíes llevados a cabo en Yabalia, un campo de refugiados en el norte de Gaza, indicaron fuentes médicas.
Se trata de Mohamed al-Hesumi, de 65 años, y su hija Fayza, de 30, que perdieron la vida cuando un misil de la aviación militar israelí impactó en su casa cerca de la escuela Tal al-Zatra, indicó el portavoz de los servicios de emergencia en Gaza, Adham Abu Salmiya, que previamente había informado de forma errónea que uno de los dos muertos era una niña de trece años.
Estas dos nuevas muertes elevan a cinco los fallecidos hoy y a 23 los palestinos muertos desde el viernes en la franja a consecuencia de los ataques aéreos israelíes.
Fuentes del hospital Kamal Adwan, en Yabalia, señalaron a la agencia oficial palestina 'Wafa' que otros tres palestinos resultaron heridos en el último bombardeo, registrado a primera hora de la tarde.
Una portavoz del Ejército israelí aseguró a Efe que 'momentos después del disparo de cohetes contra Gedera y Ashdod fue atacado el lugar en el norte de Gaza desde donde se habían lanzado los cohetes'.
Esta madrugada, dos milicianos y un adolescente murieron en otros ataques aéreos, según Abu Salmiye.
Las localidades israelíes en un radio de cuarenta kilómetros alrededor de la franja (en la costa occidental del centro del país) se encuentran en estado de emergencia y unos 200.000 niños y estudiantes no acudirán hoy a sus colegios y centros de estudio.
Desde el pasado viernes, 23 palestinos han muerto (cinco de ellos civiles) y unos 75 han resultado heridos en la mayor espiral de violencia en la zona en los últimos nueve meses.
En Israel han resultado heridos cuatro trabajadores extranjeros.
La escalada se inició el pasado viernes, con el asesinato selectivo, por parte de Israel, del secretario general de los Comités de Resistencia Populares, Zuhair al Qaisi, al que siguió una lluvia de más de 160 proyectiles palestinos y cerca de 40 bombardeos israelíes.
Se trata de la mayor ola de violencia en la franja y sus alrededores desde agosto pasado y la segunda mayor tras el fin de la operación 'Plomo Fundido', en diciembre de 2008 y enero de 2009, en la que murieron más de 1.400 palestinos, en su mayoría civiles.
