El Tribunal Supremo de Estados Unidos bloqueó hoy temporalmente la ejecución, fijada para este martes, de los presos Daniel Wayne Cook y Cleve Foster mediante inyección letal en Arizona y en Texas, para estudiar los últimos recursos contra las condenas.
El Departamento de Prisiones de Arizona publicó hoy la orden del aplazamiento de la ejecución de Cook en su página web.
En este caso, la suspensión temporal está en vigor durante un plazo máximo de 24 horas, hasta que el Supremo haya decidido si admite el último recurso de los abogados del preso, de 49 años, que fue condenado a pena de muerte en 1988 por haber estrangulado el 19 de julio de 1987 a dos hombres, uno de ellos un inmigrante guatemalteco.
Si el alto tribunal rechaza estudiar los argumentos de los abogados, que alegan que su cliente no tuvo una defensa adecuada durante su juicio o los procedimientos posteriores a su condena, Cook podría ser ejecutado hoy tal y como estaba previsto.
Por su parte, el Supremo también bloqueó la ejecución de Cleve Foster, igualmente prevista para hoy y que hubiera sido el primer reo en Texas en recibir la inyección letal de tres fármacos con el compuesto pentobarbital, un sedante comúnmente utilizado por los veterinarios.
La Corte decidió reconsiderar su dictamen de enero en el que denegó el recurso al preso de 47 años, condenado por el asesinato y la violación, el 14 de febrero de 2002 de Nyanuer 'Mary' Pal en Forth Worth.
Sus abogados afirman que funcionarios de prisiones de Texas violaron los procedimientos administrativos cuando anunciaron el cambio del componente tiopental sódico al pentobarbital y también alegan que su cliente tuvo un asesoramiento legal pobre durante su juicio y en la primera fase de las apelaciones.
En el caso de Cook, la defensa argumenta que tenía que haber sido condenado a cadena perpetua por los homicidios en primer grado de Kevin Swaney, de 16 años, y de Carlos Cruz Ramos, de 26 años, porque sufrió graves abusos físicos y sexuales durante su infancia y recientemente le diagnosticaron estrés postraumático y disfunciones cerebrales.
Su cómplice John Matzke se declaró culpable de homicidio en segundo grado y testificó en contra de Cook en el juicio con el fin de recibir una sentencia menos grave. Fue puesto en libertad en julio de 2007, después de haber cumplido 20 años en prisión.
El viernes, Cook perdió un intento de bloquear el proceso ante un tribunal de apelaciones, cuando éste determinó que la cárcel de Florence podía utilizar como parte del método de la inyección letal de tres compuestos químicos, el controvertido tiopental sódico, una sustancia anestésica.
Los abogados de Cook argumentaron que otros presos ejecutados con el fármaco tenían los ojos abiertos durante su ejecución, pero el noveno circuito del tribunal de apelaciones descartó que eso significara que los reos sufrieron dolores severos.
Si Cook es finalmente ejecutado, será el último preso en Arizona en recibir la inyección letal de tres compuestos, porque el Sistema Penitenciario de Arizona ha dicho que utilizará en un futuro solamente un fármaco para eliminar las preocupaciones existentes sobre la supuesta ineficacia del tiopental sódico.
Los 34 estados de EEUU donde la pena capital es legal usan la inyección letal y hasta ahora todos menos dos las elaboraban con tiopental sódico.
Los estados registran escasez del compuesto después de que la única compañía estadounidense que lo producía decidiera parar la fabricación del agente anestésico.
En este caso, la suspensión temporal está en vigor durante un plazo máximo de 24 horas, hasta que el Supremo haya decidido si admite el último recurso de los abogados del preso, de 49 años, que fue condenado a pena de muerte en 1988 por haber estrangulado el 19 de julio de 1987 a dos hombres, uno de ellos un inmigrante guatemalteco.
Si el alto tribunal rechaza estudiar los argumentos de los abogados, que alegan que su cliente no tuvo una defensa adecuada durante su juicio o los procedimientos posteriores a su condena, Cook podría ser ejecutado hoy tal y como estaba previsto.
Por su parte, el Supremo también bloqueó la ejecución de Cleve Foster, igualmente prevista para hoy y que hubiera sido el primer reo en Texas en recibir la inyección letal de tres fármacos con el compuesto pentobarbital, un sedante comúnmente utilizado por los veterinarios.
La Corte decidió reconsiderar su dictamen de enero en el que denegó el recurso al preso de 47 años, condenado por el asesinato y la violación, el 14 de febrero de 2002 de Nyanuer 'Mary' Pal en Forth Worth.
Sus abogados afirman que funcionarios de prisiones de Texas violaron los procedimientos administrativos cuando anunciaron el cambio del componente tiopental sódico al pentobarbital y también alegan que su cliente tuvo un asesoramiento legal pobre durante su juicio y en la primera fase de las apelaciones.
En el caso de Cook, la defensa argumenta que tenía que haber sido condenado a cadena perpetua por los homicidios en primer grado de Kevin Swaney, de 16 años, y de Carlos Cruz Ramos, de 26 años, porque sufrió graves abusos físicos y sexuales durante su infancia y recientemente le diagnosticaron estrés postraumático y disfunciones cerebrales.
Su cómplice John Matzke se declaró culpable de homicidio en segundo grado y testificó en contra de Cook en el juicio con el fin de recibir una sentencia menos grave. Fue puesto en libertad en julio de 2007, después de haber cumplido 20 años en prisión.
El viernes, Cook perdió un intento de bloquear el proceso ante un tribunal de apelaciones, cuando éste determinó que la cárcel de Florence podía utilizar como parte del método de la inyección letal de tres compuestos químicos, el controvertido tiopental sódico, una sustancia anestésica.
Los abogados de Cook argumentaron que otros presos ejecutados con el fármaco tenían los ojos abiertos durante su ejecución, pero el noveno circuito del tribunal de apelaciones descartó que eso significara que los reos sufrieron dolores severos.
Si Cook es finalmente ejecutado, será el último preso en Arizona en recibir la inyección letal de tres compuestos, porque el Sistema Penitenciario de Arizona ha dicho que utilizará en un futuro solamente un fármaco para eliminar las preocupaciones existentes sobre la supuesta ineficacia del tiopental sódico.
Los 34 estados de EEUU donde la pena capital es legal usan la inyección letal y hasta ahora todos menos dos las elaboraban con tiopental sódico.
Los estados registran escasez del compuesto después de que la única compañía estadounidense que lo producía decidiera parar la fabricación del agente anestésico.
