Cinco vecinos de Carballiño denunciaron a seis miembros de la familia Otero Cerdeira, una conocida constructora, por estafa y alzamiento de bienes. Tras ocupar las viviendas durante dos años descubrieron que se encuentran hipotecadas.
Ramón Sanmartín, Amparo Lameiro, Agustín Godás, Francisco López y María González, todos ellos vecinos de Carballiño, presentaron el día 3 de abril una querella criminal en el Juzgado de esa localidad por los delitos de estafa y alzamiento de bienes contra seis miembros de la familia Otero Cerdeira, propietarios de la empresa constructora de la iglesia de A Veracruz.
La querella se fundamenta en que hace aproximadamente dos años los denunciantes adquirieron viviendas, algunas con garaje, en las calles Evaristo Vaamonde, Eusebio Lorenzo y avenida de la Estación, mediante una escritura privada con el ánimo de formalizarla posteriormente ante notario.
Los compradores llegaron a un acuerdo con los vendedores sobre la forma de pago fraccionado, por cuyo motivo todavía tienen pendientes de abono pequeñas cantidades. Los denunciantes afirman que la constructora no les otorgó finalmente las escrituras públicas de los contratos y así poder pagar lo que todavía estaba pendiente. Así, descubrieron que las vivien das que ocupan desde hace dos años fueron hipotecadas por la empresa Otero Cerdeira, que en el día no quiso hacer declaraciones y sólo reconoció que atraviesa por dificultades económicas.
Pérdidas por valor de 601.000 euros
Los compradores de las viviendas y garajes se enfrentan a unas posibles pérdidas que rondan los 601.000 euros. Según afirman, sus propiedades fueron hipotecadas después de ser adquiridas y, en estos momentos, han asumido el abono correspondiente a las entidades financieras, siguiendo las recomendaciones del abogado, porque la constructora dejó de hacerlo. Con esta medida, pretenden evitar un posible embargo de las mismas.
Por otra parte, los afectados también han solicitado al Juzgado de Instrucción de Carballiño el embargo preventivo de los bienes de la familia, desde viviendas a fincas propiedad de los seis demandados (padres e hijos) en su intento de no perder sus viviendas.
Embargos
Al respecto, también aseguraron que sobre dichas propiedades pesan otros embargos y que además tienen constancia de que hay otros compradores afectados y en similares circunstancias. La querella criminal se encuentra en la fase de diligencias previas en el Juzgado número uno de la villa.
La querella se fundamenta en que hace aproximadamente dos años los denunciantes adquirieron viviendas, algunas con garaje, en las calles Evaristo Vaamonde, Eusebio Lorenzo y avenida de la Estación, mediante una escritura privada con el ánimo de formalizarla posteriormente ante notario.
Los compradores llegaron a un acuerdo con los vendedores sobre la forma de pago fraccionado, por cuyo motivo todavía tienen pendientes de abono pequeñas cantidades. Los denunciantes afirman que la constructora no les otorgó finalmente las escrituras públicas de los contratos y así poder pagar lo que todavía estaba pendiente. Así, descubrieron que las vivien das que ocupan desde hace dos años fueron hipotecadas por la empresa Otero Cerdeira, que en el día no quiso hacer declaraciones y sólo reconoció que atraviesa por dificultades económicas.
Pérdidas por valor de 601.000 euros
Los compradores de las viviendas y garajes se enfrentan a unas posibles pérdidas que rondan los 601.000 euros. Según afirman, sus propiedades fueron hipotecadas después de ser adquiridas y, en estos momentos, han asumido el abono correspondiente a las entidades financieras, siguiendo las recomendaciones del abogado, porque la constructora dejó de hacerlo. Con esta medida, pretenden evitar un posible embargo de las mismas.
Por otra parte, los afectados también han solicitado al Juzgado de Instrucción de Carballiño el embargo preventivo de los bienes de la familia, desde viviendas a fincas propiedad de los seis demandados (padres e hijos) en su intento de no perder sus viviendas.
Embargos
Al respecto, también aseguraron que sobre dichas propiedades pesan otros embargos y que además tienen constancia de que hay otros compradores afectados y en similares circunstancias. La querella criminal se encuentra en la fase de diligencias previas en el Juzgado número uno de la villa.
